Es un nueva medida que busca proteger su golpeada industria ante la crisis internacional.
Las autoridades incorporaron una resolución del Mercosur de diciembre de 2011 que autoriza a los cuatro miembros (la Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) a elevar hasta por 24 meses el arancel externo común a un máximo de hasta cien productos por país.
El Mercosur adoptó entonces esa decisión como una forma de mitigar los “desequilibrios comerciales derivados de la coyuntura económica internacional”.
Según la OMC, el arancel de los productos industrializados podrá ser elevado hasta 35% y el de los de origen agrícola hasta 55%, dijo a la AFP el Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior.
“Brasil y la Argentina ya formalizaron la decisión del Mercosur, y ahora deben esperar a que Uruguay y Paraguay hagan lo mismo. Una vez termine ese proceso, cada país tendrá hasta 30 días para enviar su lista”, explicó una fuente del ministerio que habló bajo reserva.
Cada país será autónomo en decidir qué productos grava por encima del Arancel Externo Común (AEC).
El gobierno brasileño realizó en pasados meses una consulta entre varios sectores para decidir qué importaciones podrían ser gravadas con el máximo arancel, aunque la lista definitiva sólo se conocerá cuando termine el proceso en el Mercosur, agregó la fuente.
“No hay proteccionismo. Esa crítica es injusta. Estamos practicando defensa comercial. ¿Cuál es el límite? El límite de los acuerdos, de la legalidad, de los reglamentos internacionales”, dijo el ministro de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior, Fernando Pimentel, en una reciente entrevista.

