La Directora Ejecutiva de Coordinadora de las Industrias de Productores Alimenticios, Mercedes Nimo, explicó ayer la difícil situación que atraviesan las economías regionales ante la Comisión de Economías Regionales del Senado de la Nación.
“El continuo aumento de los costos internos, la excesiva presión fiscal y tributaria a nivel nacional, provincial y municipal, la caída generalizada de los precios externos y en consecuencia a lo largo de toda la cadena, así como el impacto negativo de la devaluación de Brasil y Rusia son algunos de los factores que inciden negativamente en la rentabilidad de las economías regionales”, dijo Nimo que expuso estos problemas por una invitación de parte de la Comisión de Economías Regionales del Senado de la Nación.
Durante la reunión, la técnica de COPAL mostró, a modo de ejemplo, la realidad que aqueja a distintas producciones significativas de diferentes regiones del país: el sector vitivinícola, el de peras y manzanas, la yerba mate, el olivícola, el tomate y durazno para industria, las aromáticas y el del azúcar.
“Nuestra producción perdió competitividad y muchos sectores reflejan una caída de las exportaciones y una baja en las inversiones”, dijo Nimo. Para el primer bimestre de 2015 se registró una caída de las ventas externas del 3,2% del grupo de economías regionales analizadas.
Para el sector del azúcar, la baja pronunciada del precio internacional (51% entre enero 2011 y enero 2015), generó una caída en la rentabilidad. A esto se suma el escaso financiamiento para capital de trabajo, fuertes incrementos de costos laborales y un volumen de bioetanol insuficiente para canalizar una proporción importante de los excedentes de producción que se están registrando en las últimas zafras, a pesar de que en los últimos años se registraron sequias y heladas.
En el caso del sector olivícola, las ventas externas de aceite de oliva ascendieron a un volumen de 12.393 toneladas en 2014, lo que significó una retracción del 43,6% respecto de 2013. En el último año la producción alcanzó un volumen de 19.000 toneladas de aceite de oliva (-33,3% respecto campaña anterior) y 60.000 toneladas de aceitunas de mesa (-36,8% respecto período anterior). Las ventas externas de aceitunas de mesa alcanzaron un volumen de 46.507 toneladas en 2014, registrando una retracción respecto al período anterior de 42,1%. Se generaron en dicho período divisas por USD 78,1 millones FOB, con una variación de -31,1% respecto a la campaña anterior.
Nimo describió también el caso de las manzanas y peras cuyas exportaciones cayeron 54% y 22% respectivamente en el primer bimestre de 2015 en valor, y se refirió al freno de las importaciones por parte de Brasil que acentuó la crisis del sector que se combina con el fuerte aumento de los costos (logísticos, laborales), y la devaluación rusa y de Brasil, principales mercados de la fruta argentina. Este sector estima una pérdida de 200 millones de dólares para la presente campaña.
Para finalizar, Mercedes Nimo dijo que “si bien la situación coyuntural resulta compleja, las producciones regionales tienen interesantes perspectivas de insertarse en el mercado internacional. Para esto, es necesario trabajar en forma articulada con el Estado en los temas que hoy afectan la competitividad tanto coyuntural como de largo plazo”.
