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El “dólar 50/50” no mueve el amperímetro y los productores siguen en stand by

Si bien el nuevo tipo de cambio para el campo quedó sobre los $620, las ventas no despegan. Se suman factores como la menor disponibilidad de granos y las dudas sobre el escenario económico a partir del 10 de diciembre

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Por Infocampo

El primer impacto para el agronegocio tras el triunfo de Javier Milei en el balotaje fue el anuncio de un nuevo régimen de liquidación. Este nuevo esquema contempla que el tipo de cambio para la exportación será al 50% del valor  oficial y el 50% al Contado con Liqui (CLL). Si bien la capacidad de pago de la industria ascendió a $620, los productores siguen sin comercializar su mercadería. 

De acuerdo al análisis de Dante Romano, de la Universidad Austral, los productores dudan entre vender sus remanentes o esperar el impacto que supone en la actividad una suba del tipo de cambio oficial a $650

“Si bien lo segundo es más tentador, en teoría sería posible capitalizar la diferencia del tipo de cambio más alto vendiendo ahora, y el de la devaluación posterior, dolarizando el cobro”, sostuvo.

Y agregó: “Incluso si queremos volver a quedar atado a la evolución de precios de los granos, se podrían comprar futuros. El problema es cómo dolarizarse, y hoy prima la decisión de aguardar”, remarcó.

LOS DERECHOS DE EXPORTACIÓN

Otro factor que tiene su peso a la hora de decidir las ventas es el rumbo que las retenciones tomarán a partir del 10 de diciembre. Según Romano, una de las primeras señales del posible sucesor de Juan José Bahillo en Agricultura, Fernando Vilella, sería implementar una reducción gradual del impuesto en soja, maíz y trigo y eliminarlos de manera completa en cultivos de menor incidencia en la recaudación fiscal, como girasol y cebada.

MIRA: El trigo traerá el primer respaldo económico del agro para Javier Milei

Romano también deslizó la posibilidad de definir un certificado fiscal, con el objetivo de recuperar -en parte- los derechos de exportación que se le trasladan al productor en los precios.

“En este caso, al no bajar la alícuota que se paga por exportar, el precio en sí no cambiaría. La ventaja vendría por fuera. Esto hace pensar en que vender granos a valores interesante de forward sería conveniente”, detalló.

“NO HAY GRANOS”

Para la consultora Zorraquín + Meneses, la mayoria de las empresas realizaron muy pocas ventas anticipadas y ahora se preguntan hasta cuando tendrán que esperar para comercializar su mercadería.

La lógica indica que será después del 10 de diciembre y lo mismo con las ventas ganaderas, imposibles de retener mucho más tiempo”, consideraron. Existen factores a tener en cuenta, como por ejemplo la normalización en la importación de insumos y fertilizantes.

Para los consultores, el mercado de granos local no solo está divorciado del internacional, sino que además estuvo paralizado. Esto se debe a la combinación de baja producción granaria del ciclo 2022/23 y la duda sobre quien se impondría en los comicios presidenciales.

No hay granos y el que todavía tiene algo se aferra a ellos hasta saber qué va a pasar. Esto está afectando seriamente, entre otros sectores, al complejo sojero que se estima posee un 73% de su capacidad ociosa, cifra nada menor, y también al sector de los alimentos para animales“, concluyeron.