El limón se convirtió en un cítrico de lujo en México. En las últimas semanas, la producción se redujo un 40% y el precio aumentó un 150%. Las principales causas del incremento son el auge de la peligrosa plaga conocida como Dragón Amarillo, los daños que provocaron dos tormentas, y la violencia en el estado de Michoacán, el principal productor del país. El precio del limón trepó a $ 80 mexicanos el kilogramo en algunas ciudades, es decir U$S 6 (unos $ 50 argentinos), según publicó La Gaceta.
Los productores aztecas coincidieron en que los cultivos dañados por la plaga Dragón Amarillo no se recuperarán hasta 2016, según el diario español “El País”. La consecuencia más grave sobre las plantaciones es que seca los árboles en 20 días y, para sembrar nuevos y que den frutos saludables se requieren dos años de espera, lo menos. En Michoacán, la violencia narcos recrudeció en las últimas semanas. El cártel de Los Caballeros Templarios, que extorsiona desde hace cinco años a dueños de plantaciones de limones, atacó en la ciudad de Veracruz un camión que transportaba 15,8 toneladas de limones. A esto se suma que Tierra Caliente, la región mexicana donde se desarrolla el conflicto entre los narcotraficantes y los miembros de los grupos de autodefensa, concentra gran parte de la producción limonera.

