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El ternero pegó un fuerte salto en Palermo, pero aún falta para recuperar el terreno perdido

Se remataron más de 24.000 cabezas y hubo ejemplares que llegaron a casi $ 700, lo que implica un alza de $ 200 en solo un mes. Sin embargo, faltan $ 200 más para llegar al valor de 2022. Menos oferta y dólar maíz, los factores que impulsan el alza.

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Por Infocampo

En la Exposición Rural de Palermo, hubo 27 remates ganaderos que generaron operaciones por más de $ 8.000 millones; y entre ellos, el más grande fue protagonizado por el mercado ganadero de Rosario (Rosgan), que subastó un total de 24.086 cabezas.

El saldo fue una fuerte suba para todas las categorías, en línea con lo ocurrido en el Mercado de Cañuelas luego de que el Gobierno implementara el “dólar maíz”.

Los terneros llegaron a bordear los $ 700, unos $ 200 por encima de los valores promedio de junio. “El aumento de precios en todas las categorías refleja dos razones, por un lado que el deterioro para el criador ya era insostenible prodigándole una gran descapitalización sequía mediante, y por otro lado que las medidas oficiales armando un dólar maíz dispararon una modificación de costos que primero repercutió en el Mercado de Cañuelas y dio pie a la compra por parte de los invernadores a otro valor”, analizaron desde el Rosgan.

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En otras palabras: “La búsqueda del ternero tuvo mucho de expectativa y de reserva de valor, todos en nuestro país saben que el dólar tarde o temprano tendrá una corrección importante”, agregaron.

En concreto, los precios promedios de las distintas categorías fueron los siguientes:

  • Terneros: $ 696,34
  • Terneros/as: $ 660,39
  • Terneras: $ 626,47
  • Novillitos: $ 643,96
  • Novillos: $ 575,07
  • Vaquillonas: $ 569
  • Vaca de invernada: $ 393,92
  • Vaquillona con garantía de preñez: $ 209.117,65
  • Vacas con cría al pie: $ 128.745,45
  • Novillitos Holando: $ 465,07
  • Novillos Holando: $ 458,20

¿POR QUÉ SUBE EL TERNERO?

En paralelo, el Rosgan difundió su “lote de noticias” semanal, en el que la tradicional columna de análisis en profundidad se centra precisamente en la corrección del ternero y en qué factores están impulsándola.

“Tras varios meses de estancamiento en los que se llegó a acumular un retraso de más de 40 puntos porcentuales, el precio del ternero comienza a pisar firme logrando una importante corrección de valores”, advierte el Rosgan.

Sin embargo, aclara que por ahora sigue siendo solo una recuperación: aun tratándose de una importante corrección de valores en términos nominales, descontando el efecto inflacionario, este último movimiento que corrige el precio del ternero en un 31% respecto de los valores de junio, “no hace más que situarlo nuevamente en los niveles registrados por el mes de febrero, cuando el impacto de la seca aún no se percibía con la presión que luego llegó a tener sobre zafra”.

En paralelo, si se hace una comparación interanual con respecto a lo que fue el remate especial de Palermo, pero en 2022, en aquel momento el ternero se cotizó a $ 420 el kilo; es decir, que a valor constante, equivale a casi $ 900, lo que significa que el precio todavía tiene un 29% de atraso.

Dicho de otro modo, subió $ 200, pero tiene que subir otros $ 200 para alcanzar el mismo nivel que un año atrás.

OFERTA Y “DÓLAR MAÍZ”

Para el Rosgan, dos factores actúan al unísono para impulsar estas alzas. En primer término, comenzó a retraerse la oferta de hacienda, debido a que se acabó el destete anticipado como consecuencia de la sequía.

No obstante, “aun con cierto corrimiento, hasta el momento, la trayectoria que marca esta curva de oferta no deja de responder a un comportamiento estacional de salida de la invernada”, aclara la institución rosarina.

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Bajo este panorama, queda claro que la principal catapulta de las cotizaciones fue la incorporación del maíz al dólar agro y, por carácter transitivo, el traslado directo de este mayor costo de alimentación sobre el precio del gordo.

“La presión que ha estado soportando en los últimos meses toda la cadena cárnica producto de la confluencia de un elevado nivel de oferta con una demanda agotada en términos de capacidad de pago, no ha tenido mayor válvula de escape que el precio”, menciona el Rosgan.

Como parámetro: mientras la carne vacuna al consumidor subió alrededor del 71%, el valor recibido por el productor por la hacienda gorda aumentó 55%; y la invernada lo hizo solo 33%. “Todo ello en un contexto en el cual, el nivel general de precios y servicios del conjunto de la economía avanzaba a tasas del 115% interanual”, recuerdan desde el mercado ganadero.

MIRANDO A LAS ELECCIONES

Como factor adicional, cabe mencionar que, al estar la oferta comportándose de manera lógica en función de su estacionalidad, el otro motor que estaría actuando de manera subyacente en la demanda es la perspectiva de una devaluación.

“Todo indica que la expectativa de una corrección cambiaria vuelve a posicionar al ternero como un activo altamente valorado como reserva de valor”, resumen desde el Rosgan.

Una clave son las elecciones nacionales próximas a ocurrir: se trata de un activo que se adquiere a valor pesos hoy y que, una vez ingresado al campo y sometido a un proceso natural de recría, no solo permite preservar el valor del capital durante el tiempo que permanezcan en invernada si no que, además, permite trascender la actual coyuntura saliendo con un animal terminado en otro contexto económico.

“Es precisamente bajo este esquema de razonamiento donde adquiere una fuerte incidencia la expectativa general del mercado respecto de una futura devaluación y unificación del tipo de cambio, que paulatinamente pueda ir transitando hacia un mercado libre, en el marco de una economía fiscalmente más equilibrada y operativamente menos regulada”, concluye el Rosgan.

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