“En los 70′, la banana producida en esta zona abastecía a todo el mercado interno. Pero desde que el Presidente Carlos Menem habilitó el ingreso de la banana extranjera empezamos a perder espacio”, comentó Pánfilo Ayala, productor agropecuario formoseño, referente local de Federación Agraria.
Como sucedió en muchas de las producciones del agro argentina en los últimos meses, la sequía apretó como nunca y las necesidades empezaron a apilarse también como nunca. Y allí, en el extremo norte del país, en la localidad de Laguna Naineck, la falta de lluvias dejó a la vista el precario momento de los productores locales.
Este año se determinó la Emergencia Agropecuaria para la provincia. Sin embargo, en la zona aseguran que el dinero no llegó a manos de los productores.
“La sustentabilidad hoy no existe para nosotros en la Argentina. Cualquier agricultor tiene muchísimos problemas, el Gobierno te pone el pie en el cuello y no te deja respirar, con la carga impositiva y con el gasoil más caro que pagamos aquí a más de 1.000 kilómetros de los puertos es muy cuesta arriba, nos cuesta mucho resistir”, reclamó Ayala en una entrevista con radio La Red.
“Hay que mirar el Interior profundo, porque esto tiene que ver con lo cultural”, pidió.
OTROS TIEMPOS
Ayala repasó cómo era el consumo y la actividad de los productores de banana varias décadas hacia atrás.
“El ingreso masivo de la fruta extranjera que desde del año 90’ se ha impuesto en el país en lo que tiene que ver con la preferencia en el consumo nacional. Sin embargo, en los 70’ y 80’ abastecíamos sin ningún problema el consumo interno”, contó.
Ayala lo recuerda con amargura: “Desde que se dio ese ingreso empezamos a perder espacio. Competimos con mucha desventaja, las cuestiones climáticas es uno de los inconvenientes que tenemos y bueno, el precio que fue degradándose a partir del año 2000 hacia adelante”.
“Si bien es cierto, seguíamos en los mercados más importantes de la Argentina como es Buenos Aires, Rosario, Santa Fe, Mendoza, Córdoba o Santiago del Estero haciendo llegar nuestras frutas, fuimos perdiendo protagonismo comercial y llegamos a esto con algo que fue profundizándose, que es la ausencia de políticas públicas de protección que tanto estamos reclamando al Estado argentino”, pidió.
RECLAMO A LA PROVINCIA
En ese marco, Ayala cargó directo hacia el gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, quien va por su octavo mandato. En junio pasado fue relecto, como siempre desde hace 28 años, con más del 70% de los votos.
“El gobierno del doctor Insfrán lleva casi 30 años en el poder y ha hecho desaparecer más del 75% del área de agricultura en manos de agricultores”, acusó. “Nosotros estábamos segundos en agricultura en cuanto algodón después del Chaco con más de 100.000 hectáreas pero hoy no llegamos a 10.000”, reflejó.
En ese marco, explicó cuál fue la suerte de la banana formoseña.
“Teníamos 12.000 hectáreas de banana. Hoy no llegamos a 1000. En la horticultura, éramos primicia en el Mercado Central de Buenos Aires, con tomate y morrones, o zapallo. Es increíble que no tengamos un sistema de riego como Mendoza o Santiago del Estero. Eso generó que de la matrícula escolar de 300 alumnos que había en cualquier colonia de la zona, hoy no queden más de 10 por cada una. Desapareció la población rural”, graficó.
“Queremos que la agricultura sea el desarrollo de los pueblos rurales”, cerró Ayala.
