En su relevamiento al 28 de agosto la Bolsa de Cereales informó que a pesar del clima seco, avanzó muy poco la siembra de trigo en el sudoeste y sudeste bonaerense llevando la implantación en el orden nacional al 97,1 % de la intención propuesta, ahora estimada en 6,09 millones de hectáreas.
Los suelos excesivamente húmedos en estas regiones ralentizaron las coberturas estimándose que aún quedan pendientes unas 180.000 héctareas, necesitándose la continuación de jornadas soleadas para concretar estas últimas siembras.
Como contrapartida en el centro norte de la región triguera hay necesidades de reposición de humedad para satisfacer las demandas crecientes del cereal en etapas reproductivas.
Por su parte, la siembra de girasol continúa atrasada debido a la seca imperante en las provincias del nordeste y en el norte de la región agrícola pampeana. Se ha cubierto en todo el país un 9,5 % de la intención prevista, que todavía se sostiene en 2,15 millones de hectáreas. Con igual fecha del año anterior, la implantación del girasol nuevo lleva una demora de 3,5 %, basada en las dificultades que encuentran productores locales de Chaco y Santiago del Estero, para incorporar la simiente. Los reportes indican que se ha sembrado en ellas un 37 % del área prevista, cuando en la campaña precedente el porcentaje alcanzaba los 50 puntos. En el sur de Santiago del Estero la demora es de casi un 85 % mientras que en el centro norte sólo se implantó el 20 %.
En Charata y Gancedo, Chaco, el progreso asciende al 50 % y casi a un 80 % respectivamente. Mayor progreso se dio en el norte de Santa Fe, donde se estima entre 70 y 80 por ciento.
Respecto del maíz, comienzan a ampliarse las siembras. Durante la última semana continuaron las coberturas tempranas en el norte de Santa Fe, incorporándose a su vez los primeros lotes en Entre Ríos, en el centro norte de Córdoba y cuadros aislados en el centro sur de Santa Fe.
A nivel nacional, el progreso de la siembra alcanza el 0,3 % de la intención, proyectada en 2,45 M de ha, mostrando una recuperación del cultivo respecto de la siembra anterior del orden del 9,9 por ciento. Se ve el interés por incrementar las áreas destinadas al cultivo en Entre Ríos, más acentuadamente en el centro sur y en el sudoeste de Córdoba y en el norte de Buenos Aires, incrementándose ligeramente en el centro sur de Santa Fe.
No obstante lo expuesto, las variaciones en los precios relativos y el aumento de los gastos en agroquímicos podrían variar la ecuación económica del cultivo y en consecuencia en zonas con dilatadas épocas de implantación, los márgenes brutos determinarán el área definitiva que alcanzará el cereal.
