El ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, aseguró que las retenciones a las exportaciones de granos, carnes y economías regionales “no incentivan la producción, sino todo lo contrario”.
Asimismo, destacó que la eliminación de la mayoría de ellas benefició a una porción de productores que “quedó muy bien parada y en condiciones de producir más”.
“Las medidas modificaron los niveles de ingreso de los productores, pero también algunos costos van a cambiar y por eso, a priori, no se puede determinar la mejora de la rentabilidad”, afirmó Buryaile en una entrevista publicada hoy por el diario Clarín.
A su criterio, éstas medidas “resolvieron gran parte de la crisis que enfrentaba la agricultura de la región”, y subrayó que “esa franja de productores quedó muy bien parada y en condiciones de producir más”.
El ministro remarcó que “las retenciones son un impuesto que no incentiva la producción, sino todo lo contrario”, y puntualizó que por eso en su cartera se está trabajando en la aplicación de “una compensación a la distancia para las economías que están ubicadas a más de 800 kilómetros de los puertos”.
Además aseguró que “los tamberos son una prioridad” para su gestión, por lo cual hará “todo lo posible para evitar que sigan cayendo”.
“La primera decisión es seguir pagando una compensación de 40 centavos de peso por litro”, precisó Buryaile.
