El protesorero comentó que este escenario lo genera Brasil todos los años para ver cuál es la reacción del mercado. âEn Argentina no tiene repercusiones ni efectos negativosâ afirmó.
Maestre explicó que para que la medida pueda implementarse se debe modificar el sistema impositivo por medio de una âdecepciónâ, quiere decir que los países con 100 productos con arancel cero tienen que dar de baja un producto y poner allí al trigo. O bien, por medio de la Resolución 69, se tiene que realizar una reunión con los miembros del MERCOSUR, y acordar reducir el precio por un tiempo determinado.
âEsto no ha ocurrido y para que suceda falta tiempoâ, sostuvo el protesorero con lo que dio cuenta de que es imposible que mañana se pueda oficializar la medida. Además, dijo que hasta el momento no hubo más que una presentación de prensa, y este tipo de decisiones se deben formalizar en las chancillerías.
Si la medida se pone en vigencia, colocaría a nuestro país en un pie de igualdad en el tratamiento aduanero con cualquier otro país productor del cereal, por hasta 1 millón de toneladas (casi un cuarto de lo que suele venderle al año la Argentina). Pero beneficiaría a Estados Unidos y Brasil, que tienen saldos exportables del cereal y subsidian su producción agrícola, por lo que pueden ofrecer mejores precios.

