El secretario de Comercio Interior Guillermo Moreno se reunió anoche con representantes del Centro de Industrias Lácteas (CIL) y de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas (Apymel), quienes rechazaron la propuesta del gobierno de aumentar el precio de la leche a un mínimo de 0,83-0,85 $/litro para que el gobierno pague sobre ese valor un aporte no reintegrable que permita a los productores alcanzar 1,0 $/litro.
Los directivos de CIL y Apymel presentaron un documento a Moreno para fundamentar que al capacidad de pago promedio de la industria actualmente se encuentra en 0,77 $/litro (tomando la base de todos los productos comercializados en el mercado interno). La capacidad de pagos, según los industriales, es bastante menor en el caso de la leche para elaborar productos con destino a exportación (ver documento completo aquí).
A cambio de fijar un precio mínimo de 0,83-0,85 $/litro, Moreno les había prometido a los industriales un subsidio aplicable a las exportaciones de productos lácteos. Pero esto no convenció a los representantes del sector.
Los representantes de la industria láctea dijeron que quizás podrían acercarse a un precio base de 0,80 $/litro si el gobierno permitiese un aumento del orden del 5-6% en los precios mayoristas y liberase las restricciones burocráticas para gestionar exportaciones.
A Moreno no le agradó la respuesta de los industriales, pero éstos le aseguraron que esta vez no iban a firmar un acuerdo que no podían cumplir (tal como sucedió en el último tramo de 2008). El secretario de Comercio Interior por un momento se quedó sin palabras.
Notablemente desilusionado, al despedir a los industriales, Moreno les solicitó que volvieran a considerar la propuesta y prometió citarlos en las próximas horas para retomar la negociación.
