Buena parte de la oferta de hacienda que hubo durante el año 2008 se sostuvo sobre los animales aportados por los feed lots. Pero el aporte de los corrales de engorde podría descender de manera significativa a partir del año que viene.
‘Terminamos el año de la peor manera: sin comprar hacienda para reponer, con precios altos del maíz y con valores de la hacienda que vendemos que ni siquiera nos permite recuperar el costo de producción’, comentó a Infocampo Marcelo Pruss, del establecimiento Alimentos Base, ubicado en el partido bonaerense de 25 de Mayo.
Alimentos Base no recibe compensaciones del gobierno nacional. ‘Vemos la caída del negocio día a día desde el comienzo de la crisis del campo y ahora con el contexto internacional desfavorable; es un tobogán que no sabemos cuál es el piso’, añadió Pruss.
Las cámaras de los frigoríficos están colmadas de medias reses y la demanda interna se desaceleró en las últimas semanas, al tiempo que se cayeron las órdenes de compra de los principales países importadores de carne bovina.
En este escenario, el valor del recupero (cuero, cebo y huesos) se desplomó y muchas plantas aumentaron el precio del servicio a los usuarios de faena. ‘Eso también lo paga el productor’, indicó Pruss.
‘Si pensamos que en base a este contexto hay que planificar el negocio, es totalmente real que hay que dejarlo porque es inviable; de hecho ya dejamos de reponer’, comentó.
La situación también alcanza a las empresas que reciben compensaciones del gobierno. ‘Cobramos con mucho atraso y un valor cercano a 134 $/cabeza, cuando en realidad los costos superan los 130 $/cabeza’, indicó a Infocampo Marcos Benatti de Jojumar SRL, establecimiento de engorde propio y hotelería ubicado en la localidad bonaerense de Saladillo.
‘Este año se puede decir que lo cerramos bien por los buenos números que se obtuvieron a principios de año, pero si tenemos en cuenta los últimos meses, las perspectivas para la actividad son desastrosas’, comentó Benatti, para luego añadir que ‘ya pensamos no recibir más hotelería y reducir a la mitad nuestro propio engorde’.
Los únicos que hasta el momento venían trabajando bien eran los corrales que destinaban la mayor parte de su producción a grandes frigoríficos. Aunque la situación de éstos también cambiará a partir del colapso de la demanda externa de cortes vacunos.
‘Nosotros terminamos un poco mejor el año, con mucho trabajo y con un nivel de encierre estable durante todo el año, pero obviamente sabemos que las complicaciones llegarán el año próximo’, comentó hoy José García, titular de Agroofeed Ganadera.
Agroofeed Ganadera, ubicado en la localidad bonaerense de Ramallo, trabaja exclusivamente con hacienda de engorde para los frigoríficos Rioplatense y Swift Armour (JBS Argentina), que por dedicarse a la exportación no reciben compensaciones del gobierno.
