Pero el 80 por ciento de la hacienda que llegó esta mañana pertenece al ganado de las Fuerzas Armadas, lo que dejó al descubierto el alto acatamiento a la medida de fuerza.
La preocupación del Gobierno es ahora ver hasta cuándo podrá mantener abastecido el mercado con este tipo de hacienda sin que repercuta en los precios de los mostradores al consumidor.
El viernes pasado, según señalaron los ruralistas, no faltaron las llamadas presionando a los frigoríficos, grandes productores, consignatarios y supermercados para que no haya desabastecimiento de carne ante el paro que llevan adelante las tres más importantes entidades del campo.
Es que Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), la Sociedad Rural y la Federación Agraria convocaron a esa medida de fuerza tras la intervención del Gobierno en los mercados de granos y de carne.
Reclaman, además, la eliminación de las retenciones a las exportaciones de carne y de trigo. Para el paro de actividades -que implica que los productores dejaron de comercializar granos y hacienda, en principio por ocho días más- las entidades han programado distintas actividades.
Mientras la Federación Agraria continuará con los cortes de rutas que comenzaron ayer y que pretenden impedir el paso de camiones de hacienda hacia los distintos mercados del país, las otras dos entidades programaron concentraciones masivas, reparto de volantes, asambleas y reuniones para evaluar la situación del sector y las medidas a seguir.
