Guillermo Cantero, secretario de producción de Tucumán, se mostró conforme con el volumen que, a pesar de la extensa sequía que debió soportar, tuvo la producción frutihortícola en su provincia.
“Una de las características fundamentales que tiene Tucumán es que sus dos principales componentes productivos están sustentados en una agro industria”, expresó. Por un lado, se refirió a la caña de azúcar, que produce el azúcar que se consume en todo el país , exportando parte de esta producción. Por otro, aludió a la actividad citrícola, dentro de la cual distinguió dos componentes: primero lo que significa el ingreso de frutas frescas, y segundo , el hecho de que la Argentina es el principal productor y exportador de limones del mundo, sumado a todos los subcomponentes y derivados que se realizan del limón, como aceites esenciales o deshidratados de cáscara.
Asimismo, destacó que Tucumán tiene una producción importante en soja, que alcanza entre 4-5 % de la producción del país en este cultivo. Por otro lado, está incrementando en un 50 % su capacidad de plantación de frutillas, y ha incrementado sustancialmente el arándano. “La frutihorticultura es el principal sector que estamos impulsando desde el gobierno”, comunicó “sobre todo en pequeñas extensiones. Buscamos alternativas de generar valor agregado a través de esto”.
Por último, observó que la provincia venía de dos años de sequía. “Sin embargo, producto de los cambios en las variables macro económicas del país desde el 2001”, informó “se produjo un importante proceso de replantación de cañaverales, con variedades nuevas que sacó nuestra estación experimental y que, evidentemente, han sido mucho más resistentes a las condiciones climáticas adversas porque, a pesar de que los pronósticos hablaban de menos de 1 M de toneladas de azúcar producido, se terminó produciendo 1 M 60 mil toneladas”.
Verónica Scornik
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