Roppel se refirió a la siembra en una región con muy escasa humedad.
Así, explicó que “algunos lotes tienen buen desarrollo, pero la nula reserva de humedad en el perfil del suelo, hace muy inestable la situación de las sementeras, porque no sabemos que pasará con el clima de acá en adelante”.
En este sentido, expuso que, “si sigue acompañándonos y dándonos una lluvia, siempre en tiempo y forma, se puede levantar una cosecha mediana”.
Sin embargo, el representante de Coninagro reconoció que “el área ya se ha achicado y, de lo que se ha sembrado, hay una buena parte que también ha sido hecho en condiciones no apropiadas”.
En este escenario, observó que “allí quedó claramente establecido que la zona se vio muy castigada”.
Por otro lado, Roppel destacó que “lo que hoy se está consiguiendo a nivel provincia, es la declaración individual de emergencia y desastre, de acuerdo a la planilla presentada por cada productor”.
El dirigente sostuvo que esta declaración “no soluciona demasiados problemas, salvo las situaciones financieras de aquellos que tienen vencimientos bancarios donde, el encontrarse en situación de emergencia o desastre, lo cubre de algunos compromisos, y puede sobrellevar esa situación”.
Por último, Roppel expuso que “ahora hay recursos tecnológicos, como las semillas forrajeras que, para aquel productor que está en condiciones económicos, pueden ser una solución”.
Sin embargo, aclaró que “hay que analizar que eso tiene un altísimo costo que lógicamente, con números justos, cuando le incorporamos este costo, al productor se le presenta allí nomás quebranto”.
