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Relación costo-beneficio mejora para el sector lácteo

Este año la actividad estuvo golpeada por la sequía y una caída en los precios internacionales, pero la baja en los costos puede ser un factor clave para 2009.

Este año la actividad estuvo golpeada por la sequía y una caída en los precios internacionales, pero la baja en los costos puede ser un factor clave para 2009.
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Por Infocampo

La industria láctea culmina 2008 con un gran interrogante, mientras mira las proyecciones para 2009. Hoy los productores tamberos piden medidas urgentes al gobierno para que se mejore el precio que pagan las industrias lácteas, ya que durante este año tuvieron que afrontar altos costos y la caída en los precios internacionales.

“Hay un cierto desánimo e incertidumbre entre los tamberos ya que están con problemas financieros debido a que muchas empresas lácteas han retrasado sus pagos y al mismo tiempo la sequía complicó la actividad”, detalla a Infocampo José Quintana, analista del sector lácteo.

Pero si bien el panorama actual no es del todo alentador, el especialista agrega: “También la relación entre los costos y el precio que reciben los tamberos no está tan mal; si esta actividad se compara con otras, la situación no es tan complicada”.

Los tamberos están recibiendo entre $0,80 y $0,85 por litro y, por el momento, para el mercado interno se espera que estos precios continúen en la misma línea.

“Para enero de 2009 Mastellone Hnos. (La Serenísima) pagaría en el orden de los $0,90 y $0,95 por litro de leche, y esta es una de las industrias que ofrecería el mejor valor para los próximos meses”, adelanta Quintana.

Al mismo tiempo, como en muchas otras actividades productivas, la lechería no fue ajena a la caída de los costos de producción y quizás este factor puede ser determinante para proyectar un 2009 con una esperanza.

En este contexto, los precios internacionales juegan un papel preponderante. Durante 2008 el precio de la tonelada de leche en polvo cayó hasta los u$s 2000, pero, según Quintana, estos valores pueden repuntar durante el año próximo.

“Si el dólar se debilita, los precios internacionales tienden a la suba y de esta manera algunos precios se reacomodarían”, indica.

Al mismo tiempo, ahora la demanda está quieta, más que nada por una cuestión estacional, pero cuando se reactive es muy probable que haga presión sobre los valores y los eleve”, explica Quintana.

En lo que respecta meramente a la industria láctea, la presión que hoy ejerce el gobierno para contener el precio de los lácteos en el mercado interno también se trasladaría para el próximo año, pero, según el analista, “ahora el foco no está puesto en los lácteos como pasó en otro momento, los precios están estables y no han repercutido en las góndolas, entonces las empresas lácteas ya saben que para el próximo año la situación no cambiaría en este orden”.

Por otro lado, durante los últimos años la Argentina fue foco de importantes inversiones en industrias lácteas, en su mayoría de empresas extranjeras, pero hoy la crisis financiera internacional ha cambiado las perspectivas para el próximo año.

Las estimaciones indican que, si bien la actividad no caería, tampoco habrá grandes desembolsos de dinero en el sector, como se especula que pasaría lo mismo en otros sectores productivos.

Quintana también destacó que la intensificación de los tambos argentinos continuaría su marcha, pero no con tanta intensidad como en los últimos años.

(Artículo publicado en la edición de hoy de Infocampo Semanario)

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