La ronda de negocios, que se llevó adelante en el marco del XIII Congreso Forestal Mundial realizado en Buenos Aires, entre el 18 y 23 de octubre, generó acuerdos por 36 millones de dólares, y la intervención de 205 empresarios llegados desde los cinco continentes.
La mayor demanda se centró en los productos de madera terminada, sobre todo pisos y decks. La gama de oportunidades, en tanto, osciló desde las concesiones de bosques plantados, los productos forestales hasta la pasta y el papel.
Así, las cerca de 1.000 reuniones sirvieron para cumplir dos de los principales objetivos del congreso: incrementar las redes comerciales y mostrar los productos argentinos al mundo.
Pero no todo se resume en los resultados económicos, ya que el balance fue positivo también en términos estratégicos. Durante seis días, más de 7.200 personas, de las cuales el 58% eran extranjeras, debatieron sobre diversas cuestiones vinculadas con la actividad forestal.
La agenda, en este sentido, estuvo cargada: mantenimiento e incremento de la capacidad productiva de los bosques; energía; cambio climático; sustentabilidad y rentabilidad económica, e instrumentos de planificación y desarrollo forestal fueron los ejes de distintas comisiones de trabajo.
El comercio mundial registró, en 2006, 330.000 millones de dólares en productos como madera, tableros, pulpa y papel. A esto hay que sumarle u$s54.000 M provenientes de transacciones comerciales de la industria del mueble.
‘Estos números demuestran claramente la importancia que tiene el sector en una economía mundial’, indicó José Urtubey, representante argentino ante
Para Urtubey, ‘una política forestoindustrial que contenga un marco legal e institucional adecuado; acceso a la materia prima; infraestructura; financiamiento y promoción de la investigación y la innovación son las condiciones fundamentales para generar una industria próspera’.
La clave en pos de este objetivo es la interrelación fluida entre actores públicos y privados, algo que ya en
Por allí pasó el ministro de Agricultura, Julián Domínguez, y los titulares de
También participaron del congreso organizado por
Basso, en este marco, aseguró que el gobierno argentino implementará ‘una política agresiva para atraer inversiones foresto- industriales’.
El secretario de Agricultura explicó que el Plan Forestal “complementará los beneficios de
Bibiloni, por su parte, advirtió que “lo ambiental tiene que entrar en la agenda de lo empresarial, porque se terminó el Estado bobo, que renegaba.
(Artículo publicada en la edición de hoy de Infocampo Semanario)

