Nuevas pérdidas irrecuperables en las vides se produjeron en la madrugada del domingo pasado, tras otra helada de larga duración que se extendió desde las 0,30 hasta las 6,30 de la mañana, cuando el termómetro del INTA de Pocito marcó a esta última hora -2,8º, un grado más baja que la que sucedió una semana atrás.
Mientras la contingencia climática anterior diezmó la uva de mesa y pasa -ya hay reportados daños en más de 9.000 hectáreas-, la nueva helada fue peor y quemó los brotes de lo poco que quedaba y también las hojas altas y las yemas ya hinchadas de viñedos de uva para vinificar en todos los valles sanjuaninos, Tulum, Ullum, Zonda y Pedernal, informaron ayer desde el INV y la Secretaría de Agricultura.
Especialistas del Instituto, funcionarios y representantes de entidades vitivinícolas coincidieron que el nuevo fenómeno climático fue fatal para los viñedos. “Ha sido muy grave, creo que este es el golpe de gracia para muchas variedades”, dijo Hugo Carmona, desde el área vitivinícola del INV.
“Según lo que hemos visto hasta ahora, en Caucete y 25 de Mayo hubo una helada de 4 grados bajo cero por unas cinco horas, y ya se ven daños en las uvas Syrah. Cuánto va a ser el daño, no se puede cuantificar hasta que llegue la época de brotación, pero que se vio afectado, con seguridad”, agregó Carmona.
Desde el INTA, Sonia Silva explicó que la temperatura de -2,8º se registró en la estación experimental de Pocito, “que está bajo cubierta, pero seguro que en el campo, al descubierto fue mayor”.
“Ha sido el golpe de gracia para las zonas vitivinícolas, por que los daños han superado a las uvas primicia y de pasas, ahora tenemos la certeza de que hay daños en las uvas de vinificar. Ha sido un mazazo para estas uvas”, dijo por su lado José Molina, titular de la Cámara de Productores Vitivinícolas. Molina, quien además es vicepresidente de la Coviar, dijo que esta entidad ayer mandó de nuevo a los peritos del programa asociativo Proviar a relevar daños ‘para que la industria sepa qué le van a poder entregar los productores esta cosecha.
No obstante el panorama es sombrío: “creo que hemos empezado a tener un año agrícola de 18 meses, hasta el 2015 no vamos a tener producción (vitivinícola) en San Juan”, dijo Molina.
De acuerdo a los números que maneja el dirigente, la crisis del sector será muy grave y solo en plantas de empaque de uva de mesa y pasas se verá una merma de mano de obra de unos 7.000 obreros.
“Esta última helada ha sido fatal”, coincidió Angel Leotta desde la Cámara Vitivinícola, quien reportó datos de temperaturas de 4 grados bajo cero, con una duración de 5 horas en Angaco, y de 5 grados bajo cero en Caucete, 25 de Mayo, Sarmiento y 9 de Julio. Los funcionarios provinciales coinciden en los daños de las heladas, pero con matices. Para el Secretario de Agricultura local, Andrés Díaz Cano; la helada de la madrugada del domingo pasado fue ‘peor’ que la anterior; mientras que Jorge Escobar, de la Dirección de Asuntos Vitivinícolas dijo que ‘la intensidad es menos, pero como hay mas variedades brotadas el efecto económico es más importante’’.
Según publicó Diario de Cuyo, solo contando los daños que la helada produjo en uva de mesa y pasas está en riesgo casi un cuarto de las exportaciones de la agroindustria local, las cuales el año pasado representaron una facturación de 120.182.040 dólares.
