El trigo opera en alza impulsado por el alto nivel de exportaciones y los rumores de un incremento en la demanda del cereal para consumo animal. Sin embargo, las alzas del trigo estaban superando a las ganancias que se registraban en el maíz. El Departamento de Agricultura de Estados Unidos dijo el jueves que la semana pasada se exportaron 560.500 toneladas de trigo estadounidense, un 55 por ciento más que el promedio de las últimas cuatro semanas y dentro de las estimaciones previas de entre 450.000 y 650.000 toneladas.
Durante la noche Taiwán compró 80.150 toneladas del cereal estadounidense, mientras que un grupo de Egipto adquirió alrededor de 40.000 toneladas de trigo para molinería de origen ruso.
La preocupación por una ola de frío que afecta a las regiones productores de trigo blando rojo de invierno de las Grandes Planicies estadounidenses, que podría dañar a los cultivos que aún no se encuentran cubiertos con nieve, alentaba a los futuros.
Sin embargo, estas dudas eran en parte contrarrestadas por la idea que el trigo rojo duro de invierno se estaba beneficiando del buen índice de humedad en varias principales regiones productoras.
Los futuros de maíz operan en alza ya que las posibles compras de fondos indexados mantenían a la espera a los vendedores.
Además, el mercado era alentado por las ganancias del petróleo y por la fuerte demanda del cereal debido a la creciente industria de etanol.
Las condiciones climáticas extremadamente frías que azotan el Medio Oeste de los Estados Unidos también impulsaban al maíz.
Sin embargo, las subidas eran limitadas por las expectativas de una cosecha importante del cereal este año y por la amplia cantidad de posiciones compradoras especulativas que ya se encuentran en el mercado de futuros del cereal.
Los futuros de soja operan en alza luego de las pérdidas del miércoles.
Los datos de exportación de soja estadounidense difundidos por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos alentaban a la oleaginosa.
Además, las subidas del petróleo y la probable caída en la superficie sembrada con soja en Estados Unidos impulsaban a los futuros.
Las amplias reservas de soja y los pronósticos de una favorable cosecha sudamericana de la oleaginosa limitaban las ganancias.
Fuente: BCR
