El paro iniciado el martes por el Sindicato de Obreros Portuarios de San Antonio (Sopsao) en Río Negro, generó ayer una jornada compleja, con un escenario que plantea la posibilidad de perder en lo inmediato un millón de kilos de fruta que ya están en el puerto y miles de kilos más si la situación no se resuelve.
Ayer no hubo entendimiento entre este gremio y Patagonia Norte, la concesionaria de la terminal marítima.
Sin embargo, el director Regional Sur del Ministerio de Trabajo, Jorge Stopiello, dijo que el gremio “está fuera de la ley”. Es que luego de la reunión paritaria del lunes, en la que el gremio se retiró sin firmar la conciliación obligatoria, y ante la noticia de los bloqueos en el Puerto, el Ministerio dispuso “la intimación al Sindicato como primer paso a la apertura del sumario” que podría derivar en la “suspensión o cancelación” de la personería gremial. Stopiello agregó que en la misma intimación “hemos citado para el lunes a las 11 a las dos partes” para retomar las negociaciones.
Según publicó el Diario de Río Negro, ayer corrió con fuerza la posibilidad de que buena parte de la operatoria frutícola del Valle termine por trasladarse al puerto de Bahía Blanca, a través de container y mientras dure el conflicto. Sin embargo, desde la terminal portuaria Patagonia Norte aseguraron que “esa maniobra es difícil de poder concretar”.
Independientemente de ello, si no se abren las exportaciones la actividad colapsaría ya que no tiene la capacidad de frío suficiente para retener la fruta por más de 48 horas, teniendo en cuenta que en el campo se sigue cosechando y continúan ingresando grandes volúmenes en los galpones de empaque.
