La mejora de los valores externos de la soja tuvo su efecto en el mercado local. El productor supo aprovecharlo y vendió 100.000 toneladas a partir de las presencia de lluvias en los Estados Unidos.
Mientras en Chicago el poroto ganó 4,4%, en la plaza interna subió 2,8 por ciento. Los u$s274 ($2.330) pagados por la exportación significan divisas (a valores FOB) en un día de u$s40 millones.
Quizás a simple vista es un monto inferior, pero cabe destacar que el volumen negociado es superior a lo que hace semanas de viene haciendo (15.000) en el mercado.
“Una buena parte de los productores entendió la suba como una oportunidad de venta”, destacó el economista de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), Guillermo Rossi. Varios analistas recomiendan que ante leves subas, hay que comercializar porque serán muy pocas las veces que se den dichos momentos.
Los casi 23 millones de toneladas todavía retenidas en los silobolsas empezaron a devaluarse ante las bajas. Atrás quedó los u$s330 de máximo que llego a pagarse en Rosario. Hoy debe resignarse a entregar su producción con un 17% menos de aquel precio visto en mayo pasado.
Según publicó Infobae, la especulación de una suba aún mayor y la llegada de una nueva devaluación, terminaron catapultando el mal negocio. Y es que para ganar lo perdido, el tipo de cambio debería estar al menos en 9.7 pesos.
Por lo pronto las precipitaciones en el país del Norte fue tomado por los operadores como un perjuicio a la cosecha, éste logró que el poroto alcance los u$s354 la tonelada, se trata de máximos en tres semanas y media, pero su efecto también llego al maíz que es donde más se vio el alza. Este cereal ganó en dos jornadas un 6,8 por ciento. Pero quizás el veranito dure poco.
Ayer el Departamento de Agricultura de los EE.UU. (USDA, por sus siglas en inglés), detalló en su informe de cultivos, que la soja ya fue cosechada en un 40%, cuando el mercado esperaba el 30. Sin duda un dado bajista para cuando hoy abra Chicago.