La escalada del precio de trigo en el mercado internacional llega a tiempo para realizar ajustes en los planteos productivos argentinos. Y alienta la aplicación de más tecnología.
En este momento, muchos productores que optaron por aplicaciones diferidas de nitrógeno, o bien, frente a las buenas condiciones de humedad de los suelos y la mejorada relación insumo/producto, apuntalan sus aplicaciones de urea.
De acuerdo con el Departamento de Investigación y Desarrollo del Movimiento CREA, la relación trigo/urea está mejorada un 15% respecto del promedio de los últimos 5 años.
En este sentido, los productores tienen posibilidades de correcciones con N en los esquemas de fertilización con la finalidad de incrementar el rendimiento y la calidad de los trigales.
Ronny Kuhlmann, reconocido profesional y productor del sudeste bonaerense, comentó a Infocampo que, de acuerdo con la calidad de sus lotes, planea incrementos en la refertilización de finales de agosto y principios de septiembre, de hasta un 20%.Asimismo agregó que todo dependerá también de la evolución de los estados hídricos de los suelos. Otra alternativa que comentó el técnico fue la aplicación más tardía de fertilizante foliar para aumentar la calidad del grano.
Esta mejora, que anima al productor a invertir en tecnología, conlleva también a apuntalar la comercialización.
Es recomendable vender por medio de un ‘forward’ o en el mercado a término para captar este mejor precio del grano, o bien en el disponible del próximo año. Al respecto, los técnicos de Crea agregaron que los buenos precios se mantendrían hasta junio próximo.
En este sentido destacaron que fijar posición a cosecha asegura la cobertura de los costos, y el remanente de grano dejarlo para la venta en el disponible.
Otro productor que ajustará las dosis de urea en trigo es Federico Varela. Varela es productor pergaminense, y se inclina más por la aplicación total de N a la siembra. En los ambientes del norte de Buenos Aires no ajustará las dosis de N, aunque todavía está a tiempo.
Sin embargo, también siembra trigo en el sudeste, y comentó: “En muchos casos, y debido a las elevadas precipitaciones otoñales, estamos sembrando sobre el final de la fecha óptima de siembra; en estos casos, el agregado de N será total a la siembra, pero en aquellos ambientes con mayor respuesta a la fertilización, habrá ajustes diferidos al macollaje”.
Al igual que en el caso de Kuhlmann, los aumentos en la dosis serán del 20 por ciento. Aclaró que todavía es un buen momento para un práctica de refertilización con aumentos por sobre lo planeado, ya que todavía el precio del trigo en el mercado a término se mantiene alto.
Por otra parte, esta mayor demanda de urea para el trigo puede afectar la disponibilidad de fertilizante para maíz, con lo cual, al momento de la compra, desde Crea recomiendan tomar posición para maíz. Esto permite absorber el mejor precio que se avizora para el futuro del maíz.
Cabe destacar, por un lado, que la superficie sembrada con trigo todavía no alcanza los niveles de tres campaña atrás, con lo cual la probable demanda extra de urea por mejores precios del grano, no impactaría de lleno sobre el N disponible para el maíz.
En otro sentido, la relación maíz/urea y maíz/fosfato diamónico, también es un 17% mejor a la de los últimos años.
En maíz sin una respuesta de igual magnitud al N como sucede con el trigo, su mejor condición de precio alienta a sembrar con mayor tecnificación.
Por ende, si la buena humedad se mantiene hacia la segunda quincena de septiembre, incluir mayor tecnología en ambientes de potencial puede ser una interesante idea.
Artículo publicado en la edición de hoy de Infocampo Semanario
