Las heladas ocurridas durante la madrugada del domingo pasado fueron un duro y nuevo golpe para el trigo 2008/09, que ya venía afectado por serias restricciones hídricas y un nivel de fertilización inferior al deseable en diversas regiones productivas.
Las temperaturas bajo cero afectaron a todos los trigos de la provincia de Buenos Aires, en especial a los ubicados en la zona de Mar y Sierras donde se registraron los valores térmicos más bajos (entre 0 y -2 grados).
“La helada pegó bastante fuerte y ahora habrá que aguardar unos días para conocer la magnitud real que tuvo sobre los cultivos”, comentó hoy a Infocampo Jorge González Montaner, consultor privado y coordinador técnico agrícola de los CREA de la región Mar y Sierras.
“Las localidades más afectadas habrían sido Tandil, Coronel Suárez, Laprida y Lobería”, indicó González Montaner, para luego mencionar que “igualmente se registraron heladas en el resto de la provincia de Buenos Aires, que tendrán una incidencia muy negativa”.
La producción de trigo 2008/09 a nivel nacional se ubicaría entre 9,50 y 10,50 millones de toneladas (M/t), una cifra 42% a 36% inferior a la registrada en la campaña anterior y una de las más bajas de la historia agrícola reciente, según el último informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (ahora habrá que esperar nuevas estimaciones).
Pero el trigo no fue la única víctima: las temperaturas bajo cero afectaron los demás los cultivos (soja, maíz y girasol). “La helada estuvo presente y esto se nota en todos los cultivos que verán una pérdida en el rendimiento”, señaló Fernando Rojas Panelo, director del estudio Rojas Panelo & Asociados en la ciudad de Azul.
“Muchos lotes de maíz, soja y girasol también fueron afectados; en algunos casos podrán resembrarse, pero en otros no (en referencia a los altos costos del cereal)”, explicó Rojas Panelo.
Las heladas tardías fueron anticipadas el viernes pasado por el informe de la consultora Weather Wise Argentina publicado en Infocampo.
En la misma fecha del año pasado en la provincia de Buenos Aires se registró una de las peores heladas de las últimas décadas causando una drástica reducción en sus productividades (se perdieron alrededor de 1,20 millones de toneladas de trigo).
