Especialistas del INTA y de la Universidad Nacional de Salta prolongaron 30 días la vida útil de este producto para posibilitar su comercialización en sachet. La oferta tecnológica se presenta como alternativa a la tradicional elaboración de quesos de cabra.
La industria semillera busca nuevos genotipos que sean superadores a los actuales, pero según indican investigadores, muchas veces no identifican el motivo.