Especial para Infocampo
La Secretaría de Agricultura de la Nación informó que en noviembre se procesaron cerca de 3,5 millones de toneladas (MMT) de soja, lo que marcó una reducción de medio millón de toneladas o del 14% respecto de octubre, cayendo al mismo nivel de noviembre de 2024.
Si se descuenta el poroto importado, como materia prima para su procesamiento, significa que la industria oleaginosa procesó 3,2 MMT de materia prima argentina, 580.000 toneladas menos que en octubre.
El primer punto a considerar es que esta caída de la molienda contrasta con un aumento en la exportación de harina de soja, principal producto de exportación del complejo soja, que llegó a 2,71 MMT en noviembre, para lo cual se debería haber molido 400.000 toneladas más de lo que efectivamente se molió. Esto quiere decir que la industria trabajó en noviembre con stocks acumulados.
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Por otro lado, se embarcaron 2,2 MMT de poroto, con lo cual, entre molienda y exportación, noviembre demandó 5,1 millones de toneladas.
De hecho, en lo que va de la campaña comercial, que formalmente arranca en abril, ambos canales demandaron 39 MMT de soja argentina. Si asumimos, como lo hace el USDA, que unas 7,5 MMT no ingresan al circuito exportador, entre reserva para semilla, extrusión y otros usos, quiere decir que sobre una cosecha estimada en 50,3 MMT (promedio entre la pública y las privadas), al 1 de diciembre estarían quedando unas 3,5 MMT sin ingresar al circuito exportador de la campaña 2024/25.
MIRANDO EL STOCK
La pregunta con qué stock inicial arrancó la campaña, como para sumar a la oferta potencial y que resulta definitorio para encarar el último tramo de la campaña.
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Por lo pronto, tras la implementación de la reducción de las retenciones, en la semana que arrancó el 16 de diciembre, las ventas primarias de soja (contratos precio hecho más fijaciones) promediaron las 78.000 toneladas diarias, un volumen que marca una tendencia declinante.
Una explicación sería que un precio por debajo o en torno a los $500.000 no estimula el farmers’ selling. La alternativa es que el mercado se va quedando sin soja.
Por último, el dato es que las exportaciones de harina de soja para el trimestre enero/febrero/marzo se ubican por debajo del promedio. Pero esta diferencia de entre 3 y 4 millones de toneladas en equivalente poroto debería poder cubrirse con el remanente de la campaña más algo del stock inicial y la importación temporaria, de tal manera de concluir la campaña con unas 26/27 MMT exportadas de harina de soja, y 12 MMT de poroto.
