Publicidad Cerrar X

Colapsó la demanda externa de carne argentina: cuando hubo precios récord no se pudieron aprovechar

Los principales países importadores ya no están realizando compras. Entre abril y agosto de este año, cuando en el mundo se pagaban cifras altísimas, las autoridades argentinas impusieron trabas a las exportaciones del producto.

Los principales países importadores ya no están realizando compras. Entre abril y agosto de este año, cuando en el mundo se pagaban cifras altísimas, las autoridades argentinas impusieron trabas a las exportaciones del producto.
infocampo
Por Infocampo

Los ingresos de los frigoríficos argentinos exportadores de carnes bovinas se están viendo seriamente afectados a partir de la crisis financiera mundial, según indicaron hoy a Infocampo fuentes del mercado local.

‘En este momento no se están concretando negocios porque los principales países compradores están estudiando la estrategia y la posición que tomarán en este nuevo escenario internacional’, aseguró Héctor Salamanco, director ejecutivo del Consorcio de Exportadores de Carnes (ABC).

‘Nos estamos viendo muy afectados y lo peor de todo es que el panorama a futuro es muy negativo’, advirtió Salamanco, para luego mencionar que ‘la capacidad de financiamiento se está reduciendo notablemente, complicando aún más los negocios’.

Entre abril y agosto de este año, cuando en el mundo se pagaban cifras récord por cortes de carne vacuna, las autoridades argentinas impusieron trabas a las exportaciones del producto, impidiendo así generar ingresos extraordinarios que hubiesen contribuido a amortiguar la crisis que se viene.

La situación alcanzó aspectos insólitos, como el hecho, según datos oficiales del Senasa, que en julio y agosto pasado se hayan enviado apenas 24 toneladas de cortes Hilton (el producto de mayor valor agregado de toda la cadena cárnica).

‘Hemos resignado grandes cantidades de dinero gracias a las restricciones que impuso el gobierno nacional a través de la Oncca’, comentó un directivo de un frigorífico que prefirió no ser identificado.

‘Esta burocracia nos ha generado daños que a esta altura ya son irreversibles; si llegaran a abrirse las exportaciones de carnes en este momento sería inútil porque ya no hay compradores’, añadió la fuente.

El consumo de carne bovina en los países que integran la Unión Europea y en la Federación Rusa (los dos principales clientes de la carne argentina) es considerado como un bien exclusivo para personas de alto poder adquisitivo. Por ende, es una de las primeras importaciones que se pondrán en el freezer en el nuevo escenario mundial de desaceleración económica y restricción crediticia.

‘Los países operan como las personas; cuando hay menor cantidad de dinero se restringen los bienes que son considerados de lujo’, indicó otra fuente del mercado cárnico.

‘Es una lastima no haber aprovechado el momento en el que pagaban cifras altísimas por hacerse de carne: ahora lo poco que se venda se hará a precios muy inferiores’, concluyó.

Seguí leyendo:

Temas relacionados: