Representantes de las entidades de productores Confederaciones Rurales Argentinas y Federación Agraria Argentina, así como de la Federación de la Ingeniería Agronómica, la Cámara Argentina de Semilleros yla Cámara de Semilleros Multiplicadores, coincidieron en su rechazo a la propuesta de la Secretaría de Agricultura de modificar el capítulo V de la actual ley de semillas 20.247, que, entre otras cosas, restringiría el derecho de los agricultores a reservar semilla de propia producción para la campaña siguiente (uso propio).
âExiste el problema de la bolsa blanca (comercio ilegal). Pero me pregunto si es necesario quitar un derecho (el uso propio) porque no se cumple con la ley. Para hacerla cumplir existe un organismo que es el Instituto Nacional de Semillasâ, sostuvo Javier Jayo Ordoqui, dirigente de CRA.
Su par, el abogado Jorge Solmi, de la FAA, destacó que âdespués de ocho años no hay un directorio para el Inase, que es la autoridad de aplicación de la ley de semillasâ, tras coincidir en que el remedio para el comercio ilegal de semillas no es el cambio de la ley sino la profundización de la fiscalización por parte de la autoridad de aplicación de la ley.
Por su parte, representantes de semilleros multiplicadores y obtentores cuestionaron los cambios que el proyecto impulsa en materia de lo que se conoce como âla excepción del fitomejoradorâ y que significa el libre acceso a los materiales genéticos para trabajos posteriores de mejoramiento.
âDebe primar el interés público, ya que hemos visto a determinados actores proponiendo cambios en la legislación, sin consultar al resto de los participantes del sectorâ, opinó a su turno Raúl Pagnoni, presidente de la Cámara de Semilleros Multiplicadores.
âEstamos seguros que si se modifica el artículo 5to del la Ley, hasta el Estado quedará afuera y se retrasará la innovación tecnológica. Sus consecuencias serán semillas más caras sin garantías de calidad, actores que desaparecerán y menor recaudación. Esto favorecería a unos pocos y el resto lo sufriráâ, agregó.
Por último, el Dr. Carlos María Correa, director del Comité de Política de Recursos Genéticos del Grupo Consultivo Internacional de Investigaciones Agrícolas, sostuvo que un debilitamiento en el sistema de patentes podría derivar en la paralización de la innovación tecnológica aplicada a los vegetales.
El académico opinó que la expansión de patentes sobre vegetales que se está dando en el mundo, podría perjudicar a la agricultura argentina.
Correa sostuvo que para modificar una ley, como es la de semillas, debe demostrarse que los cambios serán en beneficio del interés común, cosa que no se ha hecho en este proyecto que impulsa la Sagpya.
