No es la primer vez que el gobierno nacional promete a los productores un ‘precio pleno’ para el trigo.
Definamos: el ‘precio pleno’ vendría a ser el valor de exportación menos las retenciones que se lleva el gobierno pero sin el descuento que aplican los exportadores y aprovechan de paso los molinos (que hoy es del orden de 40 u$s/tonelada).
Ahora hagamos un breve repaso de las promesas incumplidas. El 22 de abril de 2007 el entonces secretario de Agricultura Javier de Urquiza dijo en una conferencia de prensa que ‘gracias al buen funcionamiento del sistema de compensaciones, los productores podrán obtener un precio pleno por su producción para la campaña 2007/08’.
Pasaron más de dos años y, según los propios registros de la Oncca, entre 2007 y lo que va de 2009 se pagaron 16.080 compensaciones por un total de 230,92 millones de pesos. Es decir: un promedio de $ 14.300 por desembolso. En otras palabras: los productores entregaron un tractor y les devolvieron una rueda.
El 11 de marzo de 2008, cuando el entonces ministro de Economía Martín Lousteau anunció la implementación del esquema de retenciones móviles, aseguró que ‘el gobierno está trabajando para que en la próxima campaña de trigo el productor pueda obtener el precio pleno del producto’.
Luego, el 30 de abril de ese año, De Urquiza firmó un convenio con los integrantes de la Comisión de Enlace Agropecuaria por medio del cual se dejó por escrito el compromiso de que los productores reciban el famoso ‘precio pleno’.
Finalmente, llegamos a marzo de 2009 y es ahora la ministra de la Producción Débora Giorgi la encargada de realizar nuevamente la promesa.
