Durante los meses de invierno el precio del pellet de afrechillo de trigo fue, en el 2004, 80% del precio del maíz. El de girasol costó 50% más que el afrechillo de trigo y 55% del poroto de soja.
Hoy el pellet de afrechillo sólo se consigue, y con dificultad, a $ 200 la tonelada, o sea que se encuentra por encima de su equivalencia 2004 con el maíz, estando prácticamente a 100% de éste.
El pellet de girasol vale hoy $ 215 la tonelada, o sea sólo 7,5% por encima del de trigo y apenas 40% del poroto de soja.
Si el pellet de girasol se posicionara 50% por encima del de trigo o en 55% del valor de la soja, su precio debería encontrarse en los 300 pesos.
Ya no se consigue semilla de algodón buena y barata; la que queda es poca frente a su demanda habitual; el pellet de trigo es caro y escaso; en consecuencia, sí hay que orientarse al maíz, para la energía, y a los suplementos proteicos de menor valor relativo. En este segmento como ya vimos están subvaluados el pellet de girasol y el de algodón; éste tiene 20% más de proteína que el de girasol y sólo vale 10% más.
Visto todo lo anterior, el pellet de girasol y el de algodón se encuentran rezagados en su paridad histórica frente a la soja, al afrechillo de trigo y al mismo maíz. A no dejar pasar la oportunidad. Todo lo expresado hasta este punto es válido en la medida en que la soja no siga subiendo en la Argentina, circunstancia que como se comentará es altamente improbable por tres motivos.
El primero de ellos es que en Chicago el precio de la soja nueva, cosecha 2005 (a partir de septiembre), es superior al de la cosecha 2004.
Normalmente al entrar la nueva cosecha los precios bajan, circunstancia que no se presenta en este momento en los Estados Unidos, sino todo lo contrario. A modo de ejemplo, noviembre 2005 vale 2% más que julio de este año, situación de excepción en el mercado de granos, opuesta a lo que ocurrió en el 2004.
Como segundo motivo debe tenerse en cuenta que la relación de precios de la soja en dólares Rosario/Chicago tiene su peor momento, es decir, el menor valor en abril/mayo de cada año por cuanto aquí se encuentra al máximo la cosecha y la presión de la oferta, mientras que en octubre/noviembre presenta la mejor relación en promedio entre Rosario y Chicago por inversas razones a las anteriores.
Respecto del maíz la situación cosecha nueva/cosecha vieja es aún mucho más acentuada existiendo 10% de diferencia en favor de la nueva en el precio de ambas. Hasta aquí se han analizado tendencias históricas, basadas en las circunstancias fácticas difícilmente reversibles, pero el tercer motivo es de carácter aleatorio.
Este tercer elemento está representando el famoso factor climático en un año en el cual la humedad en las zonas Sur y Este del cordón maicero/sojero es escasa. Asimismo los pronósticos indican sequías para los próximos quince días en esta zona.
Santiago Gallo Llorente
Especial para Infocampo
