El déficit de hacienda no es la única causa que explica el aumento de precios registrado por la mayor parte de las categorías bovinas en los últimos meses. La otra variable en juego es un importante aumento del consumo interno de carne.
La venta de carne en supermercados, medida en pesos constantes, registró en marzo de 2007 un aumento del 25% con relación al mismo mes del año pasado, según la Encuesta de Supermercados difundida ayer por el Indec.
La venta de carne en cadenas de supermercados a nivel nacional, deflactada por la evolución del valor de la canasta de cortes bovinos medida por el IPC-Indec, fue en marzo pasado de 201,8 M/$ versus 161,0 M/$ en el mismo mes de 2006.
En términos nominales âes decir, sin descontar la inflaciónâ las ventas en marzo fueron de 311,1 M/$ contra 249,8 M/$ en el mismo mes de 2006 (+24%).
La diferencia entre pesos constantes y nominales (25% versus 24%) es mínima porque según el Indec entre los meses de marzo de 2006 y 2007 la canasta de cortes de carne vacuna registró un aumento del 0,6%. Sin embargo, el informe mensual de precios del Instituto de Promoción de Carne Vacuna Argentina âelaborado por el Ipcva a partir de 18 cortesâ indica que en ese mismo período la inflación cárnica en supermercados de Buenos Aires fue del 4,1% (en tal caso, el aumento interanual, en pesos constantes, del consumo de carne en supermercados sería del 19% y no del 25%; se trata, de todas maneras, de un crecimiento considerable).
La Encuesta de Supermercados del Indec releva información de un total de 72 empresas que cuentan con 1485 bocas de expendio distribuidas en todo el territorio nacional.
Los cortes relevados por el IPC-Indec son asado, paleta, bife angosto, cuadril, nalga y carne picada.
