Siempre entendimos que la definición de política y de construcción de poder para el sector agropecuario era como la definición de un prisma. Cada una de sus caras es necesaria para determinar esa figura geométrica. En la construcción de poder político para la cadena agroalimentaria pasa lo mismo. Distintas caras son necesarias para la construcción de ese poder.La cara de las entidades que no deben olvidar su rol gremial y sindical, la cara de las ideas, ideológica y cultural, que va en trabajos en colegios y universidades, pasando por los medios de comunicación, la cara social, a través, por ejemplo, de una Fundación, pero también la cara política, que puede ser influenciando en dirigentes o partidos actuales, y en la creación de nuevos instrumentos electorales.
En este sentido creemos necesario construir un nuevo instrumento jurídico y electoral, pues es un pedido expreso de productores agropecuarios y ciudadanos en general que no quieren saber más nada con las viejas estructuras del peronismo y del radicalismo. Indudablemente las modernas construcciones del PRO y la Coalición Cívica son más atrayentes para muchos, pero en ese marco y siguiendo el ejemplo del Partido Nacional Australiano (antes llamado Partido del Campo), que llega al Gobierno en un frente con los liberales, pensamos que de la misma manera el nuevo partido puede constituir frentes electorales con estas nuevas agrupaciones nacionales, con los partidos tradicionales, y hasta alianzas a nivel municipal, cuando el intendente acompañe claramente el modelo productivo como entendemos en Pampa Sur. Por ello en varios distritos presentamos el partido “Movimiento Pampa Sur” como expresión de un partido del campo, que puede hacer alianzas, confederaciones, reagrupamientos, pero que en forma -casi fundamentalista- tenga como norte la defensa de la cadena productiva.
Sabemos que no seremos mayoría inmediatamente, salvo alianzas, pues como dijo el pensador marxista Gramsci, “las victorias ideológicas preceden a las victorias electorales”, y nuestras primeras victorias son y serán ideológicas hasta que logremos globalmente ganar electoralmente.
La revolución de marzo fue un gran avance en ese sentido.
Miguel Saredi. Presidente del Grupo Pampa Sur
(artículo publicado en la edición de hoy de El Federal)