“¿Seguís siendo mi novia, María? Mirá que todavía no me fui del gobierno”, bromeó Mauricio Macri, mientras la coordinadora del evento cuchicheaba con Horacio Rodríguez Larreta, quien no pudo más que tentarse ante los “celos” de su líder político. La escena, que transcurrió ayer en un acto de campaña ante niños de jardín de infantes, en Caballito, mostró al jefe de gobierno porteño despreocupado por la diferencia que su candidato a sucederlo pueda obtener este domingo sobre Martín Lousteau, en el ballottage.
Macri también pareció dispuesto a hacer valer su eventual triunfo en la “pelea” que se delineó en las últimas horas: la de “todos los presidenciables” contra él, con la batalla por la ciudad de Buenos Aires como excusa electoral. “Estoy cero preocupado por los números (de la ciudad)”, dijo ayer Macri a LA NACION.
“Y si ganamos, les gano a todos los presidenciables… si están todos jugando contra mí”, agregó, en tono de broma, el líder de Pro. “(Daniel) Scioli, (José Manuel) De la Sota, (Margarita) Stolbizer, ah… ¿(Sergio) Massa también?”, preguntó el jefe de gobierno, sabedor de los distintos tipos de apoyo que esos candidatos (y obviamente, también Ernesto Sanz y Elisa Carrió) han manifestado en favor de Lousteau rumbo a la segunda vuelta.
También Larreta se mostró confiado. “Cada elección es una nueva elección para la gente. En nuestro caso vemos mucho entusiasmo por lo que hicimos y lo que podemos hacer”, dijo el jefe de gabinete. “Con el 50 más uno de los votos estamos contentos. Hay que ganar aunque sea por un voto”, dijeron cerca de ambos dirigentes en referencia al ballottage.
¿Es acaso el reconocimiento de una mayor paridad que la esperada? Para referentes del jefe de gabinete, “ninguna encuesta nos da menos de diez puntos de ventaja, así que estamos tranquilos”, de cara a la segunda vuelta donde se definirá la sucesión de Macri.
Mientras jugaba con Sheila, una de las niñas del jardín de infantes que aprendió a hacer botellas y juguetes con material reciclable, el jefe de gobierno ya sabía que Scioli, su principal contendiente en la carrera a la Casa Rosada, había calificado de “digna” la decisión de Lousteau de no resignar su participación en el ballottage.
También sabía que tanto Stolbizer como De la Sota se sumaron, en las últimas horas, a las huestes de presidenciables que verían de buen grado una derrota (o victoria ajustada) de Larreta en la segunda vuelta.
Macri desconocía, eso sí, que Sergio Massa, líder del Frente Renovador, al mediodía y en un reportaje al canal 26, había recordado que dirigentes de su riñón como Marco Lavagna y Mirta Tundis “participaron” de la recorrida con De la Sota que terminó en la foto común con Lousteau. “Voy a apoyar al que los porteños elijan”, respondió Massa, entre risas. Luego, acusó de “mezquino” a Macri por no pactar con él una “gran interna” antes del cierre de alianzas para las PASO.

