“Muchos sectores acumularon recargas abundantes (50mm) que causarían una inflexión al escenario pesimista que venía gestándose” para esta campaña 2007/08, afirmó la Bolsa de Cereales porteña en su último Panorama Agrícola Semanal.
Según el trabajo, este panorama “más alentador” permite “limitar el impacto productivo que ya ha ocasionado `La Niña` sobre la Región Pampeana”, estimado a la fecha “en torno a 6-8 puntos porcentuales” del volumen potencial.
No obstante, advirtió la entidad, la falta de lluvias en enero, a causa de “La Niña”, “ya ha dejado su huella”, fundamentalmente en las zonas periféricas a la región líder, que sufrieron pérdidas que no podrán compensarse totalmente.
Pero aclaró que de los distintos cultivos de la denominada “cosecha gruesa”, la soja es la mejor posicionada para recuperar potencial por la definición tardía de sus rendimientos (período clave: 20 enero-fin de febrero) y su plasticidad en el desarrollo.
“En consecuencia, será el cultivo estival más favorecido por las lluvias de fines de enero”, aseguró la entidad, que alertó sin embargo sobre “daños irreversibles” en no pocos cuadros y lotes de segunda al oeste y sur de Buenos Aires.
De acuerdo con el relevamiento de la entidad, al 1 de febrero, ya se sembraron con soja unas 16,82 millones de hectáreas, 99,5% de las 16,9 millones de hectáreas planificadas. El pulso húmedo también abarcó gran parte de la región maicera y detuvo el “creciente deterioro” de los cultivos del cereal, “generando una esperanzadora perspectiva productiva en todos ellos”, resaltó.
A la fecha, se implantó 99% de las 3,2 millones de hectáreas destinadas a la producción de grano comercial en la presente campaña, que alcanzaría a 20,5 millones de toneladas, 8,9% menor a la zafra pasada, pero 18% inferior a la potencial esperada si las condiciones climáticas hubieran sido semejantes al ciclo agrícola anterior. En amplias zonas productivas, la sequía y las elevadas temperaturas perjudicaron al cultivo en fases críticas de definición de los rendimientos y consecuentemente la productividad promedio a nivel nacional se redujo 17,7%, unos 1.420 kilos por hectárea menos a la obtenida en la temporada pasada.
Asimismo, al viernes pasado ya se cosecharon 406 mil hectáreas, 15% de la superficie sembrada con girasol, que aportaron 703 mil toneladas, de las cuales 68% corresponden a Chaco y Santiago del estero, 31% al centro norte de Santa Fe y el porcentual restante al inicio de las colectas en Entre Ríos. Pese a los daños irreversibles en los cultivos del sudeste bonaerense, el rendimiento promedio alcanzado hasta la fecha (17,3 qq/ha) supera en 320 Kg./ha al obtenido en igual fecha de la campaña anterior, debido principalmente a los superiores rendimientos logrados en la región chaqueña, y sostiene un aumento en la producción de grano cercano al 20-22% respecto al ciclo precedente.

