Especialistas en el cultivo de Estados Unidos, Francia y Brasil hablaron con Infocampo sobre la situación del girasol en el mundo. Desde el año 2000 el cultivo tuvo una fuerte caída a nivel global en precios y en superficie sembrada, básicamente como consecuencia de la expansión de la soja. La aparición de nuevas variedades más competitivas y de menor costo de producción que el girasol influenciaron en gran medida. Ahora vemos un proceso de recuperación de esta situación, dijo Dwight More, gerente de Marketing de Basf en Estados Unidos. Asimismo explicó que en los últimos cuatro años la demanda de aceite de girasol creció. “La división está básicamente en los que son saturados y trans y que traen consecuencias en la salud humana porque suben el colesterol malo. También están los hidrogenados y la tendencia creciente es a producir los que son medio y alto oleicos porque son los que no comprometen el bienestar corporal”, señaló More.
En nuestro país se siembran 70 mil has con girasoles que producen estos tipos de aceite más estables y se comercializan por demanda específicas de la industria.
Thierry Menou, vive en Paris y es gerente de marketing en Clearfield, comentó que de las 22 millones de hectáreas que se siembran en el mundo, 14 millones están en Europa. Dijo que en Francia los rendimientos promedio son de poco más de 2 mil kilos por hectárea. “El problema es que no investigan en tecnología de desarrollo y usan pocos híbridos. Con esta situación, es muy difícil competir con la soja”, advirtió.
Oferta y demanda global
Juan Martín Rebolini, moderó el panel de comercialización. El analista explicó que a nivel mundial se vislumbra un aumento moderado de la oferta en 1 millón de toneladas más que el año pasado. Se producirán 26 o 26 millones y medio de toneladas en el mundo pero se evidencia una fuerte caída en algunas zonas de Europa. Básicamente por la fuerte sequía que se registra en España. “Estos volúmenes serán compensados por lo que genere Ucrania. Si Argentina aumenta su intención de siembra para la próxima campaña en un 10% más, podríamos tener 3,6 millones de toneladas”, explicó. En referencia a lo que podría ocurrir en materia de precios, mencionó que “las alarmas alcistas se dan básicamente por las condiciones de sequía en Rusia, Rumania, Turquía y la prolongación de España y Francia”. A nivel local dijo que con precios de 165 a 170 dólares por toneladas, el girasol es más rentable que la soja.
Dicen los productores
Luis Arias es de General Pico, La Pampa, y representa a los productores en Asagir. “Tuvimos una campaña muy buena en nuestra zona básicamente por las condiciones climáticas en el período de floración y de llenado de granos”, dijo. Comentó que los rendimientos promedio oscilaron entre 2.000 y 2.700 kilos por hectárea.
Señaló como importante el avance de la siembra directa como sistema de producción y de la tecnología clearsol para el manejo de malezas difíciles de controlar.
Daniel Martínez asesora en esta región en unas 6 mil has. Destacó las cifras alcanzadas este año: “Promediamos los 2.800 kilos en algunos lotes y en otros llegamos a 3.600 o 3.700, que son números récord para nosotros”, dijo. En cuanto a la tecnología que aplican señaló la fertilización profunda como una herramienta fundamental.
Carlos Fangmann trabaja en la zona oeste, en Saliqueló, Trenque Lauquen y Río Cuarto. Comentó que en general fue una buena campaña. “Tuvimos entre 2.700 y 2.800 kilos promedio por hectárea”. En referencia al uso de la SD dijo que en el sur de Córdoba es de casi el 100% de la superficie.
Gerardo Dobal produce en Saldungaray y señaló que piensan aumentar la superficie a partir de los buenos rindes obtenidos. “Llegamos a 3.300 kilos en lotes que venían de pasturas”, mencionó.
