Con una de las presencias más importantes de los últimos años, la Ruralvivió ayer su primer domingo de la muestra de este año a pleno sol, un clima con una temperatura amigable, con concursos de aperos en la pista central y un satisfactorio remate de equinos en la Sala de Ventas.
Fueron 123.000 personas las que recorrieron la muestra, colmaron las graderías de la Pista Central y ocuparon calles y pabellones de la 128» Exposición de Palermo.
“El nivel de precios fue aceptable. Ojalá hubiésemos podido vender más animales”, dijo a LA NACION Gervasio Sáenz Valiente, rematador de la firma Sáenz Valiente, Bullrich y Cía., tras concluir el remate de los reproductores equinos ayer en la Sala de Ventas. “Los valores eran los esperados, entre 30.000 y 40.000 pesos los padrillos Percherón, pero si hubiese salido a la venta el Gran Campeón Macho habríamos tenido un valor de 120.000 pesos.” La raza vendió tres hembras por un total de 167.000 pesos y un macho por 40.000 pesos.
Respecto del resto, en la raza Appaloosa el único que se vendió fue un padrillo a 30.000 pesos; tres hembras Welshpor salieron por 50.400 pesos; una hembra de Tiro Argentino se vendió a 40.000 pesos; un macho de Tiro Argentino, en 25.000 pesos; una hembra Petiso Argentino, a 18.000 pesos; dos castrados a 25.800 pesos; un macho a 12.000 pesos, y un petiso Tipo Welsh, a 14.400 pesos. En cambio, no se vendió ninguno de los seis ejemplares Hackney (dos hembras y cuatro machos). El total de la venta alcanzó a 422.600 pesos, con un promedio de 28.173,33 pesos por animal.
Con un clima de algarabía se desarrolló en la pista central el Concurso Nacional de Aperos de Uso Tradicional y Caballos de Trabajo. Desde muy temprano el público colmó las tribunas para admirar el desfile de jinetes ataviados con vestimentas tradicionales y sus caballos (la mayoría, criollos) engalanados con estribos y bozales. Este conjunto de instrumentos que conforman la montura del caballo es lo que se conoce como “apero”.

