El gobernador Hermes Binner presidirá hoy miércoles el acto de adjudicación de las obras de construcción de la autovía sobre la ruta nacional 19, que une las ciudades de Santo Tomé con San Francisco, en Córdoba.
La ceremonia se realizará a las 9 en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno y contará con la presencia de los ministros de Economía, Ángel Sciara, y de Obras Públicas y Vivienda, Hugo Storero.
En los aproximadamente 130 kilómetros del trazado se construirán dos carriles, que se sumarán a los dos ya existentes. De esta manera quedarán habilitados cuatro carriles, dos para cada sentido de circulación.
Tras la adjudicación, hay un plazo de un mes para la firma del contrato y luego otro más para el inicio de obras, estimándose que se concretará a principios de abril. La construcción de la autovía demandará 30 meses de trabajo, por lo que se estaría inaugurando a fines de 2010.
El costo total de la obra será superior a los 515 millones de pesos, que serán aportados íntegramente por la provincia.
De ese monto, el Banco Mundial financiará 126,7 millones de dólares con un crédito a 15 años (representan más del 72% del costo total de la obra), pagadero en cuotas iguales desde abril de 2012 a octubre de 2021. La diferencia entre el costo total de la obra y lo que financia el banco ‘unos 42,9 millones de dólares’ será solventado por la Provincia con recursos genuinos.
El proyecto está a cargo de una unidad ejecutora integrada por los ministerios de Economía y de Obras Públicas, mientras que a nivel ejecutivo lo llevarán adelante la subsecretaría de Proyectos y Financiamiento Externo (Economía) y la Dirección Provincial de Vialidad (Obras Públicas).
Por tratarse de una obra que la provincia financia sobre una ruta de jurisdicción federal, se está negociando un mecanismo de compensación con la Nación por ese endeudamiento.
La realización de esta obra beneficiará a una importante región productiva de la provincia, generando beneficios directos e indirectos a por lo menos cinco departamentos: Castellanos, Las Colonias, San Jerónimo, San Martín y La Capital. De igual modo, contribuye a dar fluidez a las comunicaciones y al transporte de cargas de la Región Centro y potencia el “corredor bioceánico”.
