Del total de exportaciones de semillas de soja realizadas el año pasado que representaron u$s 22 millones, el mercado paraguayo representó la mitad. Según datos oficiales, de 1,27 millón de bolsas, 600.000 se destinaron a este país vecino que compró a un valor promedio de u$s 20 la unidad de 40 kg para sembrar una superficie de 300.000 hectáreas sobre un total del área sojera de 2 millones.
Una de las empresas que participó del negocio es Relmó, que proveyó con 8.000 bolsas de semilla padre (fundadora) para multiplicación y que le representaron ingresos por u$s 160.000. La compañía proyecta este año afianzar su presencia comercial con unas 150.000 bolsas y llegar a abastecer, en un plazo de cinco años, el 30% del mercado paraguayo, alentado por la reciente aprobación de materiales RR.
Uruguay, donde se siembran 300.000 ha, es otro de los clientes al que le vendieron 18.000 bolsas de semillas para reproducción a un promedio de u$s 16 cada una por un volumen superior a los u$s 290.000. En los próximos años prevén ocupar el 25% del negocio y enviar 30.000 bolsas en 2006.
En semillas de soja existen dos estrategias de venta, precisó Julio Ferraroti, presidente de Relmó. Por un lado, la exportación de semillas para multiplicación, para lo cual hay que validar las variedades con el país de destino, como es el caso de Paraguay y Uruguay. Por otro lado, se exportan las licencias de variedades en los países en que se va a sembrar. Esto se está desarrollando en Sudáfrica (donde se siembran unas 300.000 ha) y Estados Unidos.
Desde hace varios años Relmó trabaja con una empresa sudafricana que tiene el 50% del mercado y que comercializa tres variedades, dos de tipo convencional y una de tipo RR y estarían licenciando una más este año.¡§La contraparte evalúa los ensayos, cuando hay un interesado se le otorga la licencia y debe pagar una regalía por las bolsas que vende. En 2006 obtuvimos unos u$s 60.000 por este concepto, a razón de u$s 2 de regalía por bolsa vendida¡¨, explicó Ferraroti.
Una tercera vía para llegar a las operaciones comerciales son los programas de investigación génetica. En este sentido, Relmó trabaja con dos socios estratégicos: Brasil y Bolivia, donde estiman estar con variedades en dos años. Con Brasil se vincularon con la región sur, donde se siembran unas 2,50 M/ha y pretenden ocupar el 10%, y con Bolivia, donde se siembran unas 600.000 ha en verano y 300.000 ha en invierno, aspiran a copar el 50% del negocio en cinco años. ¡§El mejoramiento genético de soja argentina ha adquirido la excelencia de los principales países. La tasa de rendimiento, la tolerancia a enfermedades y la calidad industrial es equiparable a los Estados Unidos y las empresas locales estamos buscando mercados internacionales habida cuenta de la baja rentabilidad que se tiene en la Argentina¡¨, manifiesta Ferrarotti. El 100% de las variedades generadas en el país son a partir de investigaciones privadas, a excepción de la EEA Inta Obispo Colombres, de Tucumán, que desarrolló una variedad con el aporte de particulares.
Alexia Giménez
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