La escasa presencia de agua en el perfil del suelo en las áreas trigueras del centro y norte de la región pampeana siguen condicionando las siembras de ciclos largos de trigo (y si no se registran lluvias importantes en los próximos días también comenzarán a condicionar a los ciclos cortos).
El factor climático negativo se suma así a la incertidumbre comercial y los problemas de costos y logísticos presentes para abastecerse de insumos. Otra cuestión importante, si bien es difícil de cuantificar, es que no existe buen ánimo para trabajar: todo se hace por inercia.
A la fecha se habría sembrado el 10% del área potencial de trigo 2008/09. Se tratarían de 568.000 hectáreas de un total proyectado en 5,0 M/ha por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
Dos tercios de la siembra se realizó en las provincias del norte del país, que registran buenas condiciones de humedad. Pero el centro-norte de Córdoba, el norte de Santa Fe, Entre Ríos, La Pampa, el sudoeste y el extremo sur de Buenos Aires ve pasar la ventana de siembra óptima para las variedades de ciclo largo sin haber concretado significativas coberturas.
Las siembras también se demoran en el norte bonaerense y en el centro-sur de Santa Fe, donde, si bien la humedad sub superficial parecería ser suficiente, su carencia en el horizonte superficial limitan la posibilidad de implante.
‘Las 5,0 M/ha proyectadas (una cifra 9% inferior respecto del ciclo 2007/08) parece ser el techo máximo que alcanzaría el trigo en la campaña actual, no descartándose una reducción mayor en tanto no haya modificaciones del contexto climático-económico. Las lluvias serían también escasas durante la próxima semana’ apuntó el último informe de evolución de cultivos de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
En el centro-norte de Córdoba la persistente falta de humedad impide la siembra, amenazando reducciones en la superficie sembrada mayores a las inicialmente previstas. En condiciones normales la región aportaría un 10% a la cobertura total nacional. Pero en el contexto actual ese porcentual disminuiría drásticamente, alcanzando el nivel más bajo de los últimos años.
Hacia el noroeste de Córdoba, en el departamento San Justo, apenas si cayeron unos pocos milímetros esta semana, cuando en realidad se necesitan como mínimo 20 milímetros para que la implantación se pueda realizar. La humedad sub superficial no sería condicionante. En áreas del departamento de Río Primero, las necesidades de agua aumentan a unos 30-40 milímetros, estimándose sembrado entre un 5-10% de la superficie prevista.
En Totoral la implantación está muy comprometida por el contexto climático. En la zona central, Villa María lo escasamente sembrado se ha hecho casi sin fertilizar (zona de Etruria-Pozo del Molle).
En la zona de Oncativo se implantó un 40%, con una merma superficial del 30% respecto del 2007/08. Se interrumpió la siembra por falta de humedad. Lo hecho ha sido realizado con semilla curada pero sin emplear fertilizante.
En el sur de Córdoba las precipitaciones fueron de escasa magnitud, no aliviando las secas condiciones de los suelos. En Río Cuarto, las precipitaciones fueron positivas para productores que barbecharon lotes anticipadamente. De todos modos las coberturas no se generalizaron aún y esperan mayores aportes. En la zona de Laboulaye, solo lotes muy puntuales se implantaron. La falta de agua perfilaría una reducción del área a sembrar.
Hacia el eje conformado por Vicuña Mackena, Del Campillo y Villa Valeria se implantó una mayor extensión y un 5% se halla ya emergido. No obstante falta humedad en los primeros cinco centímetros del perfil.
Escaso 3% sembrado en el centro y norte de Santa Fe por escasa humedad que causarían de persistir una fuerte caída en el área cultivada. Lluvias mínimas necesarias de 40 milímetros para garantizar siembras. Los requerimientos aumentan hacia el norte de la provincia (80 mm) disminuyendo a unos 40 milímetros hacia la zona central.
En el centro-este de Entre Ríos la actividad sigue paralizada, con escasos lotes puntuales realizados sobre suelos medianamente provistos de agua. Una escasa oferta de agua hubo sobre todo el territorio provincial a excepción del nordeste provincial y sobre un área muy limitada en las localidades de María Luisa, Oro Verde y Sauce Pinto.
En el núcleo Norte se cubrió un 12% por siembras realizadas en los departamentos de Marcos Juárez y Unión de Córdoba y en los departamentos de Belgrano, Iriondo y San Martín de Santa Fe con variedades de ciclo largo. Las coberturas con las intermedias y fundamentalmente las de ciclo corto están supeditadas a un mayor aporte hídrico, dependiendo de ello la extensión que alcanzará la superficie cultivada regional.
En la zona central de Marcos Juárez se cubrió un 70% de la intención reducida, ya en un 50% respecto de la campaña anterior. En Santa Fe, la zona aledaña a Cañada Rosquín observa un 20% implantado con ciclos largos, pero los cortos necesitan humedad.
También es necesario aportes de agua en Los Cardos y áreas aledañas donde el clima seco solo posibilitó la cobertura del 30% del área prevista, en tanto en la zona de María Susana el progreso llega al 60%. Como en otros casos las coberturas se realizan disminuyendo las fertilizaciones y con curaciones de semillas más económicas, orientando la reducción de los gastos de implantación.
En Cañada de Gómez solo se implantó un 10% de la intención inicial, contemplada una merma del 20% respecto del año agrícola anterior. Se empleó un nivel tecnológico inferior (fertilización media) y la ventana de siembra de los ciclo largos se está alejando.
En el núcleo Sur las deficiencias en el perfil superior de los suelos son significativas y hasta la fecha el avance de la siembra alcanza al 10% (terminando en unos 15 días la fecha óptima para las variedades de ciclo largo).
En el sudoeste bonaerense lluvias por encima de los 20 milímetros aliviaron parcialmente los suelos brindando condiciones al menos mínimas para comenzar las siembras. Mejor posicionados en este contexto están los productores locales que
utilizan la siembra directa y los que con sistema tradicional efectuaron un barbecho prolongado. En estas condiciones se podría anticipar para los próximos días un avance de siembra del orden del 15% al 20% sobre la superficie estimada a sembrar.
En el sudeste de Buenos Aires volvieron a registrarse algunas lluvias que van recomponiendo paulatinamente la humedad edáfica tanto superficial como sub superficial en la zona de Necochea, Balcarce, Otamendi y Mechongué. Los reportes indican para estas regiones disminuciones en la superficie a sembrar por sustitución del cereal a favor de la cebada cervecera y en menor medida de la colza. Similar situación observa la zona de Tres Arroyos donde productores locales realizarían el cereal en menores superficies pero con utilización de altos niveles tecnológicos. Comenzó a sembrarse en la zona de Coronel Dorrego.
Imagen: GEA / Bolsa de Comercio de Rosario

