Las estadísticas oficiales muestran que durante el mes de diciembre, es decir en plena cosecha del trigo, la molienda del cereal rondó las 390.000 toneladas, cuando en diciembre de 2011 se habían procesado unas 470.000, lo que marca una caída interanual del 16 por ciento.
La del último diciembre es, incluso, la cifra más baja de los últimos cinco años. Solo en diciembre de 2008 se habían molido 400.000 toneladas, el segundo volumen más pobre en estos últimos 60 meses.
Considerando que el consumo interno es súper estable, la única razón para que se achique la molienda es una caída en la exportación de harinas. Efectivamente, las estadísticas de la industria molinera muestran que en diciembre se exportaron 60.495 toneladas, contra más de 76.000 en noviembre y más de 82.000 en octubre. El volumen resulta 21% menor que las 75.700 toneladas exportadas en diciembre de 2011.
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