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Anticipando el futuro, se dice presente

Bajo un sistema de trabajo basado en el asociativismo, esta empresa que faena 100 mil pollos diarios se prepara ahora para incursionar en la ganadería bovina, ovina y porcina.

Bajo un sistema de trabajo basado en el asociativismo, esta empresa que faena 100 mil pollos diarios se prepara ahora para incursionar en la ganadería bovina, ovina y porcina.
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Por Infocampo

Las Camelias es una empresa avícola que comprende desde la línea reproductora hasta la comercialización, y que este último año incorporó una línea de abuelos para garantizar la calidad y la genética de su producción.

Con una faena diaria de 100 mil aves y unos 3,5 M de pollos en crianza, la empresa se prepara para duplicar el año próximo esta impresionante producción.

La metodología de trabajo se sustenta en un sistema integrado. “Trabajamos con unas 350 familias que ponen el lugar y el trabajo y reciben un pago por la performance que obtienen”, contó a Infocampo Graciela Marsó, propietaria de Las Camelias, junto a sus hermanos.

La empresa cuenta con una planta de faena e incubación modelo y en breve inaugurarán una fábrica de alimento balanceado única en el país, ubicada en Villaguay, y montada bajo las estrictas normas europeas.

La decisión de homologar los criterios de producción con las demandas de los compradores fue la estrategia que acompañó a la empresa desde sus inicios y que permitió su acceso al mercado chino, mucho antes de que en la Argentina siquiera se pensara en el mercado asiático.

“Estamos convencidos de que el crecimiento de nuestra empresa depende de la exportación, porque nos permite balancear las colocaciones internas y nos posibilita hacer una estrategia a largo plazo, más proyectable.”

Capacitación, inversión y devaluación mediante, esta agresiva política de comercio exterior provocó que en la actualidad “exportemos pechuga a Europa, pollo entero a los países árabes, Chile, Rusia y otros países de Centroamérica. También enviamos garras y alas a China”, puntualizó Marsó.

Bajo este sistema de integrados, como ella lo llama, “al final de octubre vamos a tener una construcción de 6 km de galpón y para el año próximo tenemos proyectado hacer 20 km más”.

La cosa es sencilla, Las Camelias ofrece el aval para que los pequeños productores puedan adquirir la infraestructura, les proveen los animales y luego les compran la producción.

“La idea ahora es aprovechar este sistema del integrado, para extendernos hacia ovinos, porcinos y vacunos”, dijo Marsó, antes de especificar que también utilizarán sus 14 centros de distribución en todo el país para comercializar los nuevos productos.

Marianela Garbini

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