“Todos los días nos levantamos y miramos el pronóstico porque tenemos pánico”, contó un comerciante de Belgrano a C5N, barrio que volvió a quedar bajo el agua tras la tormenta de lluvia y granizo que se desató este martes.
Ya preparados por temporales anteriores, los locales del barrio porteño de Belgrano comenzaron a poner compuertas en el ingreso para impedir el agua. Algunos, con humor, improvisaron cañas y mostraron su destreza con la pesca, pero una gran mayoria de vecinos reiteraron sus reclamos por las constantes inundaciones.
En la esquina de Cabildo y Blanco Encalada ya se desplegaron gomones para trasladarse en caso de que el agua siga subiendo, según publica Infobae.