La primera subasta del Gobierno de Brasil de derechos comerciales de explotación forestal en el Amazonas, parte de una campaña para poner fin al a deforestación ilegal, atrajo a ocho postores.
El Ministerio de Medio Ambiente empezará a revisar las ofertas de compañías que buscan explorar 96.360 hectáreas de bosques durante un periodo de 40 años, dijo Tasso de Rezende Azevedo, director del Servicio Nacional Forestal de Brasil, entidad que esperaba que los derechos se vendieran por un mínimo de 2,8 millones de reales (US$1,6 millones) al año.
La subasta es la primera vez que el gobierno brasileño otorga este tipo de licencias, dijo Azevedo. Forma parte de una campaña para reducir la deforestación ilegal en la selva amazónica, que abarca nueve países y cubre 5 por ciento de la superficie terrestre del planeta.
“Esta es nuestra primera prueba’, dijo Azevedo en una entrevista telefónica desde Brasilia. El plan del ministerio “nos permite subastar un millón de hectáreas este año’.
Sólo se permitió a compañías brasileñas explorar 40 por ciento de la Selva Nacional de Jamarí, en el estado de Rondónia, en el norte del país. El área, dividida en tres bloques, puede producir unos 2,9 millones de metros cúbicos de madera al año, dijo el servicio forestal.
Hasta 80 por ciento de la explotación forestal en la Amazonia brasileña es ilegal, dijo el grupo ambientalista Greenpeace en su página web. Brasil tiene 193 millones de hectáreas de bosques nacionales registrados, 92 por ciento de los cuales se encuentran en el Amazonas.
Quienes ganen la subasta podrán buscar y vender madera, semillas y frutos, aunque no pueden comercializar productos minerales o animales o buscar recursos acuíferos. La fecha límite para presentar ofertas era hoy, y Brasil no ha fijado una fecha para anunciar los resultados de la subasta, dijo Azevedo.
Fuente: Bloomberg