Echemos un vistazo al estado de situación de esta compañía global que en 2018 cumplirá 200 años de existencia y cuya actividad se ha desarrollado en un mundo que ha sabido de imperios y colonias, democracias y totalitarismos, capitalismo y comunismo, hasta desembocar en esta nueva situación de multipolaridad.
El balance 2011 muestra a una compañía operando con cuatro grandes unidades: agronegocios; azúcar y bioenergía; alimentos y fertilizantes.
En total, en este último ejercicio alcanzó una facturación de u$s58.743 millones, a la cual el comercio de commodities agrícolas es el principal contribuyente. Este monto de negocios representa un crecimiento de 55% respecto de lo que facturaba apenas en 2007.
Expresado en volumen, el último año movió 142 millones de toneladas (Mt), de las cuales 117 correspondieron a los commodities.
El panorama que trazan en la compañía es que la creciente demanda global de alimentos incrementará el comercio mundial. Según datos del Usda, entre 2011 y 2021, el intercambio de cereales y oleaginosos pasará de 256 a 321 millones de toneladas. Y esta es una de las grandes oportunidades de Bunge.La otra es la demanda de energía. La firma ha hecho una gran inversión en Brasil para la producción de caña de azúcar, a partir de la cual obtener bioetanol y cogenerar energía eléctrica con el bagazo.
En este país, que produce el 20% del azúcar del mundo, Bunge produce 28.000 ha propias de caña y en aparcería con los dueños de los campos otras 155.000 hectáreas. Tiene ocho ingenios con una capacidad de procesamiento de 21 Mt. En 2011 de sus plantas salieron 655.000 metros cúbicos de etanol y se generaron 114 mW de electricidad.
Un dato no menor es que de los u$s58.743 M, Brasil contribuye con 10.907, por detrás de Europa y los EE. UU. Otro dato destacable es que sobre un total de activos por u$s7.230 M, Brasil tiene el 55% con 4.004 millones. En un plan a cinco años, Bunge volcará otros u$s2.500 M en el negocio de la bioenergía en la mayor economía del Mercosur.
En tanto, la Argentina tiene una contribución bastante marginal a la facturación de Bunge. En 2011 fueron 3.660 millones de dólares, que representó el 6,2 por ciento. Además, los u$s287 M de activos de largo plazo representan solo el 4% del total de la empresa.En nuestro país, Bunge aparece con joint ventures con AGD, tanto en Terminal 6 S.A., como en Terminal 6 Industrial S.A. y en Ecofuel S.A., la empresa de biodiésel también.
También con AGD y sumando a LDC Commodities (Dreyfus), Bunge formó en Paraguay Complejo Agroindustrial Angostura S.A., con la idea de procesar en el vecino país las crecientes cosechas que están logrando.
En tanto, sigue fortaleciendo su red logística global. El año pasado concluyó una nueva terminal portuaria en la región de Northwest Pacific (EE.UU.) y adquirió otra en Ucrania, en la localidad de Nicolayev. Así se prepara la empresa para celebrar sus primeros dos siglos de existencia.
