Las reuniones ministeriales de la OMC, realizadas en Londres y Ginebra, sirvieron para acordar diferencias. Así describió el escenario el comisario de Comercio de la Unión Europea, Peter Mandelson. En agricultura, las delegaciones de países en desarrollo reclaman a la UE que reduzca los aranceles del 38%, pero no lograron el objetivo, porque los europeos hicieron una contrapopuesta para que países como Brasil y Haití disminuyan los aranceles en materia de servicios y bienes industriales. Justamente, los productos industriales son el punto álgido. Estados Unidos y la UE pretenden que el arancel máximo sea del 15%, lo que significaría una reducción del 70%, posición que no comparten los países sudamericanos. La próxima reunión será del 13 al 18 de diciembre en Hong Kong.