El presidente del Banco Central, Juan Carlos Fábrega, ha decidido suspender el proceso de mini ajustes de la paridad oficial, como mecanismo de defender la competitividad cambiaria de la producción nacional, para no convalidar una nueva devaluación del peso, ahora presionada por la desconfianza de una porción de los mercados financieros, según publica Infobae.
En la plaza cambiaria las transacciones se mantienen de todas formas como muy pocos negocios, porque si bien aparecen compradores temerosos de perder oportunidades de adquirir el billete a un precio inferior al que proyectan para mañana, del mismo modo desaparecen los vendedores que comparten la visión de una tendencia alcista, al menos hasta que se advierta una solución amigable de la deuda en default.