Así como el río Yangtze, en la ciudad china de Chongqing amaneció teñido de un extraño color rojo, el arroyo El Chañar, en Nogoyá, Entre Ríos, desde hace tiempo presenta una coloración rojiza intensa. Según publicó el diario UNO, la responsable sería la industria láctea La Sibila.
El arroyo, que se une al norte de la localidad con el arroyo Nogoyá, situado al este, ya no tiene peces y aseguran que nadie se atreve a meterse en las aguas. Así, los vecinos publicaron en Facebook las imágenes.
Por su parte, Carlos Laferriere, concejal del bloque UCR en la localidad, expresó que ya en diciembre de 2011 presentaron ante el Poder Ejecutivo Municipal un pedido de informe para que se constate el estado del arroyo, ya sus aguas presentaban un color rojizo intenso. Además plantearon la necesidad de controles periódicos sobre las aguas del arroyo sobre el que vierte sus efluentes, previo tratamiento, la principal empresa láctea local La Sibila.
“Este año renovamos el pedido de informe y sólo obtuvimos una respuesta extraoficial por parte del intendente (Daniel Pavón) mediante la cual nos explicó que la planta La Sibila era la causa de la coloración. También nos dijo que desde la secretaría de Ambiente Sustentable de la Provincia se los había intimado a realizar acciones, pero nunca nos dieron más detalles. Formalmente, nada”, dijo.
Asimismo, Laferriere manifestó que en el arroyo El Chañar el agua permanece estancada mucho tiempo y sólo cuando llueve mucho se limpia.
El secretario de Ambiente Sustentable de la Provincia, Fernando Raffo, indicó que “La Sibila fue sancionada en el marco de la ley provincial de Efluentes Industriales ya que se determinó que esta trabajando fuera de los parámetros requeridos”. De esta forma, la empresa deberá abonar 60.000 pesos en concepto de multa y se los intimó a realizar las mejoras necesarias.
“La mayoría de las algas son verdes, pero en el caso de esta colonia son rojas”, sostuvo Raffo.
Hace un tiempo la empresa incorporó una nueva planta de secado de suero desmineralizado al 90%. La causa es una falla en el proceso interno de la planta, ya que a partir de la ampliación de la cadena productiva se produjo un desequilibrio.

