Los productores que integran la Asociación Agrícola y Ganadera de La Pampa aprovecharon la visita de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner a la provincia para entregarle a personas cercanas a su comitiva un petitorio en el cual se solicitan soluciones urgentes para los problemas que afectan a los criadores.
‘Llevamos adelante un acto sobre la avenida principal de Santa Rosa, donde pacíficamente pedimos que se nos escuche y que se nos tenga en cuenta a la hora de determinar políticas para el sector’, dijo hoy a Infocampo Andrés Souto, presidente de la entidad pampeana.
‘La presidenta tiene que saber que la ganadería ha perdido en nuestra provincia 500.000 cabezas en muy pocos meses y esta situación es realmente preocupante’, añadió.
Cristina Fernández de Kirchner presidió hoy un acto de entrega de viviendas en el Club Estudiantes de la ciudad de Santa Rosa junto al gobernador de La Pampa, Oscar Jorge, y a los ministros del Interior Florencio Randazzo y de Planificación Federal Julio De Vido.
A continuación se reproduce de manera completa el petitorio dirigido a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner:
Santa Rosa, 12 de agosto de 2008
A la Señora Presidenta de la Nación Dra. Cristina Fernández de Kirchner
Presente
La Asociación Agrícola de La Pampa se dirige a Ud. a los efectos de hacerle llegar el siguiente cuadro de situación de la ganadería pampeana, y las propuestas para modificarlo.
A. Cuadro de Situación
1. La ganadería de cría del caldenal muestra cuadros de rentabilidad muy deficitarios. De acuerdo a un estudio efectuado por nuestra Institución, una explotación ganadera del caldenal pampeano de 2500 Has tiene resultado cero con 85% de terneros logrados y nulo endeudamiento
2. El promedio de terneros logrados por el conjunto de las explotaciones ganaderas de cría de la Provincia está en el orden del 65%. Como conclusión de los datos anteriores, se puede afirmar que hoy las explotaciones de cría de La Pampa no garantizan siquiera una economía de subsistencia.
3. El propio Gobierno Provincial ha reconocido que el costo de producción de un ternero está en $ 5 por kg. El precio actual es de $ 3,50 por kg. La producción provincial de terneros es de 1 millón de cabezas. El quebranto para los productores de cría de la Provincia de La Pampa está en el orden de los 250 millones/año.
4. La ganadería de cría está siendo desplazada cada vez más hacia zonas marginales con evidentes mermas en la productividad (estimada por fuentes confiables en el 21%). El Stock provincial de vacunos cayó el 12% en estos últimos años (480.000 cabezas aproximadamente)
5. Las pocas explotaciones de invernada de acopio o de propia producción que quedan en el Este provincial, muestran mejor situación por una relación favorable en la reposición de terneros. El desplazamiento por parte de la agricultura es fácilmente verificable, por lo que los invernadores de esa zona son una especie en extinción.
6. Los terneros producidos en La Pampa necesariamente deberán terminar su engorde con participación de los feedlot. Debido a las condiciones cada vez más marginales para la producción de terneros, necesariamente debe recurrirse al destete precoz.
7. En el esquema planteado en el punto anterior, el paradigma de que los animales deben pesar más para ser faenados derivó en un claro perjuicio para los ganaderos de zonas de cría porque el ternero destetado precozmente no encuentra clientes. A los feedlot no les conviene la compra de un animal joven por la dificultad de no llegar al peso mínimo de faena.
8. Los subsidios del Gobierno Nacional para los feedlot incentivan solamente la producción de animales para consumo. A esto se suman los efectos negativos de la cuotificación de las exportaciones, derivando en un mecanismo perverso de claro perjuicio para los proveedores de terneros.
9. El mecanismo de subsidios a los feedlot tiene dos interrogantes: la demora en el pago, y la inseguridad de contar en forma permanente con fondos presupuestarios. Estas incertidumbres se potencian para los ganaderos de cría porque, de no haber subsidios a los feedlot, no habría quien compre los terneros.
10. Se está observando una fuerte concentración en el cobro de subsidios por parte de los grandes feedlot. Los ganaderos de cría estamos preocupados por la posibilidad de que dicha concentración derive en acuerdos de precios que nos perjudiquen aún más.
11. El acuerdo marco firmado entre las entidades del campo y el Gobierno en abril de 2008, a pesar de su buena intención, es negativo para los productores por la fuerte discrecionalidad del último control (Secretaría de Comercio). Esto es así porque la normativa vigente tiene, en este aspecto, cuatro pasos: 1) Mantener el precio de los 13 cortes populares, 2) Fijar el cupo de exportación en 45.000 toneladas/mes, 3) Adicionar un cupo de 10.000 toneladas de vacas conserva, y 4) en la medida que no se cumpla el primer paso se caen los dos siguientes. El productor termina siendo perjudicado por no poder garantizar el precio de los cortes populares.
12. Lamentablemente para los ganaderos de cría el acuerdo del pasado 6 de junio de 2008 entre el Gobierno y un frigorífico para exportar las 10.000 toneladas procesadas de vacas no ha derivado en el prometido precio de $ 1,72 por kg para los ganaderos de cría, debido a que los permisos de exportación no se asignan propiciando la competencia.
13. La existencia de encaje exigidos a los exportadores y el triple control a que se somete a las exportaciones (Aduana, ONCCA, y Secretaría de Comercio) para la obtención del ROE, constituyen un mecanismo burocrático y no exento de discrecionalidad que entorpecen e impiden las ventas externas.
14. El consumo interno por habitante está en niveles muy altos, lo que desmiente que los precios sean caros. Para abril de 2008 habríamos llegado a los 82 kgs/habitante/año. En ese mes el consumo total de carnes se habría aproximado a los 120 kgs/habitante/año. La dieta de la población argentina no se vería resentida con una diversificación que contemplara menor consumo de carne vacuna.
15. La demanda internacional de carne vacuna es extraordinaria en volumen y en precio. El mundo quiere carne vacuna y Argentina decide no vender, en una actitud incomprensible. El petróleo y los granos empujarán hacia arriba los precios durante un largo período, por lo que se hace inevitable la elaboración urgente de un plan estratégico para las carnes entre todos los actores. De no ser así, será otra oportunidad perdida en la que los principales perjudicados serán quienes hoy pretenden ser beneficiados: los sectores de menores recursos.
b- Políticas para mejorar el cuadro de situación:
Marco general
Coincidimos con el INTA en que la política de carnes en Argentina pasa por plantear el aumento de la producción de todas las especies, bajar el consumo de carne bovina a 2 millones de toneladas, aumentar el consumo de carne aviar y porcina, y exportar 1,2 millones de toneladas de carne bovina.
La síntesis es: cómo seguir consumiendo 100 kilos de carne por persona y, a la vez, dejar que la ganadería bovina se desarrolle.
Políticas específicas:
Plan de reactivación y aumento de producción de todo tipo de carnes, y de sus exportaciones.
Explicar a la población que la diversificación de la dieta es favorable, y tiene además consecuencias positivas en incrementar la presencia internacional de la carne vacuna con sus efectos sobre inversiones y empleo.
Subsidiar a los sectores de menores recursos el consumo de cortes populares a través del sistema de asignaciones familiares.
Supresión de cupos de exportación en un proceso gradual no superior a seis meses.
Reducción de derechos de exportación en un proceso gradual de 12 meses.
Incentivos para la producción de carnes aviar, porcina y lana
Incentivos para el incremento de vientres bovinos.
Modernización del actual sistema de distribución de carnes vacunos por medias reses.
No interferencia del Gobierno Nacional en la comercialización interna de la hacienda en pié.
La ganadería pampeana y la del país está agonizando debido a las distintas modalidades de intervención en los mercados que afectan a las dos puntas de la cadena ganadera: los productores y los consumidores.
Sra. Presidenta: consideramos que la mejor forma de defender el salario real y propiciar el incremento sostenido de la economía nacional, es apostar decididamente a la producción.
Saludamos a Ud. con distinguida consideración.
