Con ese dinero solventan los gastos de los cuatro vehículos y de los seis agentes de policía que integran la Patrulla Rural (que fue creada en 2004).
“Los delitos rurales han disminuido de manera significativa gracias a la patrulla, con excepción de algunos casos de abigeato que se registran en las chacras cercanas a la ciudad de Pringles”, comenta Jesús Díaz, presidente de la Asociación de Productores de Coronel Pringles. La tasa de seguridad (0,35 peso/ha) se abona en dos pagos anuales junto con la tasa vial. “Lo recaudado es afectado a una cuenta especial que es administrada por una comisión de empresarios agropecuarios y concejales, quienes también se encargan de recoger los requerimientos de los productores para luego trasladárselos a los integrantes de la patrulla”, indica Díaz.
Los vehículos de la patrulla -comandada por el agente Axel Bodga- recorren diariamente toda la extensión del partido de Pringles. Y en épocas de caza los controles se intensifican para detectar a cazadores furtivos (y también a potenciales delincuentes disfrazados de cazadores). Los vecinos se comunican con los policías rurales por radio o celulares. “La patrulla no sólo está afectada a tareas de vigilancia, sino también a prestar un servicio a los productores, ya que si alguien, por ejemplo, necesita ser trasladado a la ciudad por una urgencia de salud, puede recurrir a la patrulla”, apunta Díaz.
Ezequiel Tambornini |