Otra de las Pymes lácteas con tradición en el sector analiza liquidar definitivamente sus tambos. Se trata de La María Pilar, una firma familiar con una trayectoria de más de 80 años, localizada en Catriló, La Pampa.
Por estos días los directivos de la empresa están evaluando cerrar los tres tambos propios, que cuentan con unas 3000 vacas Holando y una producción diaria del orden de 50.000 litros de leche.
‘Estamos analizando cerrar todo, liquidar nuestro plantel y dedicarnos a otra cosa”, dijo hoy a Infocampo Guillermo Trotz, titular de la firma. “En diez días definimos nuestra situación”, añadió.
Además de los tambos, la firma cuenta con una industria láctea especializada en elaborar quesos blandos, semiduros y duros. “Analizaremos cómo siguen las cosas: si esto no mejora, cerramos definitivamente la empresa’, relató Trotz con angustia.
‘Nuestra situación es triste y lamentable: tenemos que decidir reducir el plantel, posiblemente cerrar todo, porque así ya no se puede continuar. Perdemos 0,30 $/litro por cada litro producido y así no hay quién aguante’, agregó el empresario pampeano.
Además de la crítica situación del mercado interno y la falta de posibilidades para exportar, otros de los factores que están carcomiendo a la actividad es la extrema sequía que se extiende en la región. ‘Eso nos terminó de matar. Todo lo que estamos haciendo es con alimentación comprada, hecho que nos imposibilita aún más llegar a compensar los costos’, puntualizó.
La falta de financiamiento a tasas accesibles también es otro de los factores desfavorables. ‘Los bancos no dan créditos; hay muchas trabas para poder conseguir financiamiento y no hay alternativa posible de continuar’, aseguró Trotz. La empresa cuenta con un plantel de unos 100 trabajadores directos.
