El arroz es otro de los cereales estivales que comienza su campaña con el pie derecho. Sus perspectivas favorables están dadas fundamentalmente por la condiciones productivas al inicio, y su valor de mercado.
Infocampo dialogó con Edgardo Arévalo, docente de la cátedra de Cereales y Oleaginosas de
El técnico, especialista en el cultivo, manifestó que la superficie nacional de arroz se mantendrá o tendrá un leve incremento. Expresó al respecto que, Entre Ríos, una de las provincias que más aporta al grueso de la producción, tendrá un incremento del orden del 7 al 10% de su superficie, alcanzando las 87.000 ha (71.700 ha en 2008/09).
Este cereal, que se riega a partir del macollaje hasta 25 días previos a la cosecha, requiere de perfiles recargados para su emergencia.
En este momento, la zona arrocera entrerriana posee una disponibilidad hídrica que llega al 90% del agua útil, y en algunos ambientes también hay excesos, con lo cual la emergencia del cultivo está más que asegurada. Más aún, si se tiene en cuenta que la región está dentro de la ventana temporal óptima para la siembra.
Por su parte, Corrientes, otra de las provincias de peso en la producción del cereal, vio retrasadas las condiciones para el comienzo. De acuerdo a los datos que aporta Arévalo, en esta provincia recién en este momento se recompusieron los perfiles. De acuerdo al técnico consultado, el precio está más que bien visto entre los arroceros.
“Con un precio promedio que, mayormente, no supera de 0,14 u$s/ha, iniciar la campaña con 0,20 u$s/ha es muy favorable”, sostuvo.
Los costos de producción del arroz están beneficiados por la baja en los fertilizantes. En este sentido, los costos/ha disminuyeron aproximadamente a la mitad, mientras que los herbicidas, también de importante injerencia, mantienen su precio.
Otro de los puntos sobre los que recayó es la baja en los combustibles. “Para los productores que bombean agua de pozos para inundar los arrozales, el gasto de combustible es mayor respecto de aquel que lo hace por represas”, dijo.
Así concluyó que el rendimiento de indiferencia oscila entre los 6.000 a 6.700 kg/ha, y sostuvo que es común obtener rendimientos de 7.500 a 8.500 kg/ha.
(Artículo publicado en la edición de hoy de Infocampo Semanario)
