Según un informe publicado por la consultora Ecolatina, la menor cosecha prevista por el impacto de la sequía y el déficit comercial del sector energético “consumirán” el efecto del alza en los precios de la soja.
“A diferencia del pasado, el actual boom de commodities no se destinará en su totalidad a abultar el saldo comercial, ya que el ‘plus‘ del agro (especialmente de la soja) deberá destinarse a compensar las menores cantidades producidas este año, y a financiar los incrementos de los bienes energéticos (hasta que se recupere el autoabastecimiento)”, establece el informe.
Asimismo, el informe indica que el precio de las materias primas creció en el primer trimestre del año un 9,2% en relación a diciembre, e indicó que el valor de la commodities energéticas, especialmente el petróleo, subieron aún más, según informa El Cronista.
Respecto a la sequía, el recorte de la producción mundial de soja alcanzó un nuevo récord mediante los contratos a futuro y su cotización. Esto es indudablemente una buena noticia para la Argentina, dada la elevada participación de la oleaginosa y sus subproductos dentro de las exportaciones totales (24%)”, expone el informe.
Sin embargo, la consultora dijo que “las perspectivas no son favorables por el lado de las cantidades”, y citó cifras oficiales del Ministerio de Agricultura, que estimó una merma de la producción de la oleaginosa del 12% interanual, aunque destacó que según proyecciones privadas, esa reducción alcanzaría al 18% interanual.
Por su parte, también se señala que el precio de la soja deberá destinarse a financiar la suba de los precios energéticos. En 2011, la cotización de la soja aportó un monto de u$s 3.500 millones, mientras que el incremento de los precios energéticos restó divisas para el país por u$s 1.170 millones.
